Colima.- Andrés Manuel López Obrador, precandidato de Morena, PT y PES a la presidencia de la República, llegó a Colima y fue recibido por sus simpatizantes como un ‘rock star’.
Antes de que el tabasqueño llegara a la capital del estado, el parque Libertad de la capital del estado ya registraba una afluencia importante en uno de los flancos contiguos al palacio de gobierno. Había simpatizantes de Morena, PT, PES y ciudadanos.
Arriba del templete solo estaban los organizadores y presidentes de los tres partidos que apoyan la coalición.
Muchos simpatizantes de la zona metropolitana llegaron por sus medios pero también al sur del centro histórico se pudieron apreciar varios camiones en lo que se habrían trasladado a simpatizantes de comunidades alejadas de la capital.
AMLO llegó al centro de la capital a las 12:30 horas y los simpatizantes se desvivieron en elogios y le gritaron presidente.
Andrés Manuel subió al estrado y se le veía contento, estiró los brazos, agradeció la asistencia de los colimenses a quienes les dijo eran libres y no acarreados.
El discurso no fue muy diferente al que ha pronunciado en innumerables ocasiones en su recorrido por el país ya por más de una década, pero los asistentes al mitin lo querían escuchar en persona, lo esperaban como si fuera la presentación de un artista, sabían qué diría, pero lo querían escuchar.
Los asistentes que permanecían cerca del templete, utilizaban sus cámaras, celulares lo que podían para tener un recuerdo del tabasqueño.
Apenas comenzó su discurso y señaló que van a ganar, que están al frente en todas las encuestas y que el triunfo de este movimiento es casi seguro.
Hace días el ex gobernador de Colima Fernando Moreno Peña, señalaba que si las elecciones se ganaran por encuestas, el tabasqueño ya hubiera sido presidente, pero que las elecciones las gana el PRI porque sabe movilizar a la gente el día de las elecciones y AMLO no.
«Estamos bien y de buenas, nos ha ido bien en esta precampaña, así se registra en todas las encuestas, estamos arriba en todas a nivel nacional. Pronto vamos a lograr sin violencia el cambio que se requiere en el país».
Frente a los colimenses dijo que como presidente seguirá con tres principios, no mentir, no robar y no traicionar al pueblo.
Aseguró que no será un presidente como Carlos Salinas a quien llamó el padre de la desigualdad, o como Felipe Calderón de quien dijo se robó la presidencia y convirtió a México en un cementerio y que tampoco se bañaría de corrupción como Enrique Peña Nieto.
«Vengo a Colima para invitarles que entre todos consumemos esta obra de transformación, que tengan confianza, se puede sacar adelante a nuestro país, todavía podemos lograr que haya justicia, progreso y tranquilidad, todo depende de enfrentar los grandes problemas nacionales y de manera especial, enfrentar el principal problema, la corrupción, no se va a disminuir, la vamos a acabar y desterrar de México».
Afirmó que solo si se termina con la corrupción se logrará el renacimiento del país y que esto llevaría a una revolución pacífica.
Señaló que la corrupción no solo está abajo en los moches sino que ésta viene de arriba, de los gobernantes, y que ellos son los que le dan el visto bueno al robo de los recursos públicos.
Dijo que el banco mundial estima que el 20 por ciento de los recursos de los presupuestos se desvían en actos de corrupción y que de llegar a la presidencia terminaría con ello para destinar esos recursos al campo, a la producción, educación y salud de los mexicanos.
«Es mucho lo que se roban los políticos corruptos, mucho más de lo que nos imaginamos».
López Obrador adelantó que de llegar a la presidencia no aumentaría los impuestos ya que con los recursos existentes es suficiente eliminando los actos corruptos de los gobiernos, prometió eliminar las pensiones a los ex presidentes y generar una política que le de más a los de abajo y menos a los de arriba.
«Vamos a comenzar por rescatar al campo de su abandono, vamos a apoyar a los productores, se fijaran precios de garantía para los precios del campo y no vamos a comprar en el extranjero lo que consumimos».
También señaló que los otros precandidatos le han copiado sus propuestas de aumentar el salario y recursos a los maestros.
Afirmó que la deuda pública se ha multiplicado con Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña, por lo que su gobierno buscará eliminar los privilegios en el gobierno y en los políticos.
Ya entrevista con los medios pidió a Enrique Peña Nieto que llame a cerrar filas a todo el gabinete de Seguridad del gobierno federal y asuma su responsabilidad, no desatender, ni delegar a los funcionarios la atención al problema de la inseguridad y la violencia.
Planteó que se tiene que enfrentar el flagelo de la violencia que está incontrolable en el país y demandó que el secretario de la Defensa, Salvador Cienfuegos no vaya a recibir el premio honoris causa a Chiapas, ¿qué tiene que ver eso con su función?, es un asunto político, no le corresponde.
Comentó que Peña Nieto tiene que atender todo lo que tiene que ver con el grave problema de la inseguridad y la violencia, y puso como ejemplo a Colima como un estado que se ha descompuesto (en seguridad) en este sexenio.
Indicó que ya desde Calderón estaba mal la situación de inseguridad, de violencia en Colima, pero en este sexenio rebasó todo lo permitido.
“No me gustó tampoco el que inmediatamente después de que encuentran asesinados a los sacerdotes, empiezan a vincularlos con la delincuencia, son independientemente de su actividad, de lo que hayan han hecho, estamos hablando de que son seres humanos”, dijo.
Comentó que cuando se llegan a esos extremos de no respetar a un sacerdote, son síntomas de mucha descomposición social y urgió que se atienda el problema de inseguridad.
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