Colima.- Si alguien conoce el proceso que ha sufrido la capital del estado en su reordenamiento vial es el director de transito municipal, José Ramón Valdovinos Anguiano, quien habló sobre las modificaciones que se han realizado.
Y es que actualmente, tan solo en la capital del estado, hay un record de movilidad de 280 mil vehículos diarios.
Con este trienio José Ramón cumple tres periodos municipales al frente de esta dirección.
En entrevista con AFmedios, explicó que primero por el crecimiento de la Zona Metropolitana, Colima – Villa de Álvarez, y después por la inclusión de los municipios de Coquimatlán, Comala y Cuauhtémoc al movimiento urbano de la capital, ha sido necesario adaptar las vialidades y la circulación en ellas.
«El contexto de la metropolización ha generado un efecto de movilidad extraordinaria en los últimos años», dijo.
El funcionario municipal, explica que la alta concentración de oficias, dependencias, instituciones educativas, de salud, áreas de servicio y centros comerciales han generado un reordenamiento en movilidad de la capital del estado.
«Esto nos ha llevado durante varias administraciones, establecer un nuevo orden en el comportamiento vial, en donde tenemos que conciliar la seguridad del peatón y la utilización de las vías publicas por ciclistas, motociclistas y automovilistas», añade.
Valdovinos informa que este contexto, la adecuación normativa y actualización reglamentaria, han sido uno de los factores determinantes que han incidido en programas de carácter educativo para los ciudadanos, así como en la inclusión de actividades de movilidad no motorizadas y en el reordenamiento vial.
Y es que el crecimiento de la capital en su parte norte y oriente, originó nuevas vialidades que tuvieron que incluirse a las ya existentes sin que estas generaran problemas.
Es así como en la actual administración municipal se han construido 13 puentes que dan conectividad a la zona Colima y Villa de Álvarez.
«Esto nos ha motivado a actualizar la normatividad, darle importancia a la persona como usuaria de las vialidades, al peatón no al motorizado, pero conciliar la relación entre ambos y preocuparnos por el equipamiento vial».
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