Colima.- El 60 por ciento de los tratamientos que brinda la Secretaría de Salud en Colima a través del Sistema de Vigilancia Epidemiológica en Adicciones (Sisvea), corresponde al consumo de metanfetaminas y estimulantes, de acuerdo con la estadística que se tiene de los años 2018 y 2019.
Guillermo Blanco Govea, coordinador estatal de las Unidades de Especialidades Médicas Centro de Atención Primaria en Adiciones (Uneme-CAPA), afirmó que
la mayoría de las personas que acuden a solicitar atención, lo hacen porque tienen una dependencia a estas sustancias, que les ocasiona problemas de tipo conductual, mental e inclusive físico.
El especialista explicó que esta medición se obtiene del registro de servicios en las
unidades, centros de rehabilitación, clínicas de tratamiento de adicciones y los Centros de Integración Juvenil (CIJ), la cual coincide con el segundo lugar que ocupa Colima en el consumo de estas drogas, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (Encodat), publicada en el año 2017.
Indicó que esto demuestra que los estimulantes es la droga que ha tenido un repunte en el estado en la última década, registrando una prevalencia del 2.4 por ciento que ubica al estado por encima de la media nacional.
Durante una entrevista con AFmedios, sostuvo que ese 60 por ciento de servicios es un dato propio y actualizado, ya que el instrumento más fiable y validado para conocer cómo está el consumo de sustancias en el país y en las entidades, corresponde precisamente al estudio antes citado y que se dio a conocer hace cuatro años.
Si las condiciones de la pandemia por COVID-19 lo permiten, este año se tendría un nuevo levantamiento estadístico en el país, mientras tanto Colima trabaja en la conformación de su propio observatorio epidemiológico en adicciones, que brinde mediciones oportunas y cercanas, para enfocar de manera más precisa las políticas públicas en la materia.
Blanco Govea recordó que los datos destacados de la Encodat de 2017, colocan a Colima por arriba de la media nacional tanto en consumo excesivo como en consumo per cápita de alcohol, al ocupar el quinto y octavo lugar, respectivamente, con un consumo promedio de 5.8 litros por persona.
En lo que corresponde al tabaco, la prevalencia es del 5.8 por ciento de personas que lo consumen todos los días, por ello la entidad está en el lugar 17 por debajo de la media nacional; sin embargo, en la población adolescente el estado se encuentra en el cuarto lugar de consumo.
Respecto a sustancias ilícitas, el estudio mantiene a Colima en quinto lugar de consumo con fines tóxicos o de cambio conductual por lo menos una vez en la vida de las personas, ya sea cannabis, inhalantes, metanfetaminas e incluso drogas médicas. En este rubro se tiene una prevalencia de 12.4% que ubican al estado por arriba de la media nacional.
Otro dato importante que se desprende de la encuesta tiene que ver con la edad, toda vez que los 17 años es el promedio a nivel nacional para el consumo de sustancias; en el caso de Colima se ubica entre 18 y 19 años, por ello se deben enfocar los esfuerzos en la etapa de la adolescencia temprana y tardía que va de los 13 a los17 años de edad.
Estos datos hablan de que hay una normalización por parte de la población en general respecto al consumo de sustancias y una menor percepción del riesgo que conlleva consumirlas, mientras que por otro lado el país habría pasado de ser productor a consumidor de sustancias.
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