El principal argumento de Mario Delgado, presidente de MORENA, para defender la candidatura de Félix Salgado Macedonio a gobernador de Guerrero es que no hay sentencia que lo declare culpable o inocente de los abusos sexuales de los que se le acusan. Esto es cierto, y en ese sentido hay que preguntarnos ¿por qué no hay sentencia?
1.- No hay sentencia, primero que nada, porque este señor ha tenido fuero durante años al ser diputado federal y ahora senador. Proceder penalmente en su contra implicaría la aprobación de la mayoría absoluta de la Cámara de Diputados.1
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador se ha opuesto públicamente al fuero como requisito para poder juzgar a la clase política, y hayan existido varias iniciativas al respecto, lo cierto es que no han prosperado y el pacto de impunidad entre todos los partidos persiste.
2.- No hay sentencia porque, antes de ser senador, cuando se inició una de las denuncias penales en su contra fue protegido por el gobernador priísta, Héctor Astudillo, según los dichos del exfiscal de Guerrero, Javier Olea2.
3.- No hay sentencia porque, según los Hallazgos 2019 de México Evalua3, Guerrero es el cuarto estado peor evaluado en el índice de confianza en las autoridades penales y las víctimas prefieren no denunciar por miedo. A esto hay que sumarle que Félix Salgado Macedonio es un hombre que ha sido varias veces candidato a gobernador del estado y presidente municipal de Acapulco, lo que lo coloca en una posición de poder frente a cualquier víctima.
4.- No hay sentencia porque en el delito de violación es particularmente difícil que la víctima decida denunciar de manera inmediata al hecho, lo cual complica la recabación de pruebas, además de que lo común es que no haya testigos.
5.- No hay sentencia porque, aunque las víctimas decidan romper el miedo y denunciar, no tienen una representación legal adecuada. En Guerrero hay un representante legal por cada 98 víctimas4.
6.- No hay sentencia porque, estadísticamente, aunque la víctima denuncie, difícilmente conseguirá una sentencia condenatoria. En Guerrero sólo el 1.6% de las investigaciones del ministerio público derivan en vinculación a proceso ante un juez5.
7.- No hay sentencia, porque en México tenemos un sistema punitivo que castiga la pobreza y protege a los poderosos en el que será muy difícil que Salgado Macedonio reciba una sentencia; porque eventualmente si llega ser gobernador seguirá teniendo fuero6 y su poder será aun mayor.
El argumento de “no hay sentencia” de Mario Delgado deja a la justicia penal como único recurso para detener la candidatura de alguien que ha sido acusado de violar mujeres. Y ese recurso, además, es inviable porque hay un sistema judicial y político que lo protege: a esto le llamamos pacto patriarcal.
Deben existir otros frenos distintos a la prisión para evitar que los hombres puedan seguir abusando de las mujeres. Esos frenos primero que nada deben de ser políticos: si hay acusaciones contra Salgado Macedonio deberían de ser tomadas en serio, si hay protestas de tantas mujeres deberían de ser atendidas y elegir una candidatura distinta en tanto se esclarecen judicialmente las acusaciones en su contra.
Esto por supuesto, va más allá de Morena. Es responsabilidad de todos los partidos políticos mandar el mensaje social de que nos creen y que la violencia contra las mujeres no será tolerada.
Columna publicada con la autorización de @PaolaSaeb
1 Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, artículo 111. Disponible aquí.