La policía de Tailandia dijo el sábado tener pruebas suficientes para procesar a dos hombres detenidos a los que se acusa de llevar a cabo un letal atentado en la capital del país, Bangkok, en agosto.
Las autoridades confían en que los dos hombres detenidos, identificados como Adem Karadag y Mieraili Yusufu, son los culpables de colocar y hacer detonar una bomba en el santuario de Erawan el pasado 17 de agosto, dijo el jefe de la policía nacional, Somyot Poomphanmuang, el sábado. La policía busca a otras 15 personas que cree están implicadas en el caso.
Diecisiete personas fallecieron y más de 120 resultaron heridas en el atentado.
El motivo del ataque fue una represalia por parte de una red de contrabando de personas que fue desbaratada, según las autoridades.
«Hoy la policía tiene certeza de que Adem y Yusufu son los verdaderos autores» del atentado, dijo Somyot as la prensa. «Adem es el hombre de camisa amarilla que colocó la bomba. Yusufu la detonó».
El caso contra los dos hombres se sustenta en imágenes de cámaras de seguridad de circuito cerrado, testigos, coincidencia de muestras de ADN y pruebas físicas, explicó Somyot agregando que los dos confesaron.
La policía llevó a los dos hombres a la escena del atentado el sábado para una reconstrucción del hecho y su posterior fuga. Estas reconstrucciones son parte habitual del trabajo policial en Tailandia.
El vocero Prawut Thavornsiri anunció el viernes por la noche que se emitieron órdenes de arresto para 17 personas que se cree implicadas en el caso.
Los dos detenidos fueron acusados formalmente de homicidio, intento de homicidio y asociación ilícita para utilizar explosivos con el objetivo de matar, dijo Prawut.
Somyot dijo que la contundencia de las pruebas obligó a los dos sospechosos a confesar. Dijo que la identificación de los presuntos autores pone fin a la investigación policial.
Pero restan muchos interrogantes sin respuesta. La policía no ha explicado cuál fue la acción que provocó la supuesta venganza, y Somyot insinuó que los contrabandistas de personas «podrían haber contratado» a otro grupo para perpetrar el atentado. Se desconoce la identidad y nacionalidad de otros de los presuntos involucrados.