Colima.-Una pantalla exhibe las características de los vehículos y su precio. El tiempo corre, pero los compradores sólo esperan a que el costo baje para hacer sus ofertas.
“Se reciben ofertas a la una, se reciben ofertas a las dos, se reciben ofertas a las tres”, dice el subastador, mientras en el panorama del interior del auditorio, en el Complejo Administrativo de Colima, ningún participante levanta su paleta.
Es la subasta de 157 vehículos que el Gobierno del Estado ha acumulado por varios años, y de la que pretende obtener 3 millones de pesos. Se ofertan desde motocicletas por poco más de mil pesos, hasta vehículos de lujo por cerca de 90 mil.
Sin embargo, los compradores van preparados, y en la mayoría de las ocasiones, hacen oferta hasta que el precio baja al 50 por ciento.
Kristian Meiners Tovar, secretario de Administración y Gestión Pública, busca con una mirada acuciosa a algún hombre o mujer que levante la mano y en ella lleve una oferta.
Por fin. En la sexta etapa de uno de los vehículos, en la que el precio es 50 por ciento al original, hay dos interesados, ambos pasan al frente de las filas de sillas, y entran a una nueva disputa.
Con dos asientos de distancia, cada uno escribe su oferta en una hoja, deben superar el precio base de 24 mil 371 pesos con 88 centavos.
“La paleta número 23 ofrece 25 mil 200 pesos, la paleta numero 54 ofrece 32 mil pesos, se adjudica a la paleta número 54”, sentencia la directora de Bienes Patrimoniales mientras el resto de los presentes celebran y lamentan el resultado.
Meiners Tovar asiente con expresión de victoria, el subastador continúa con la siguiente oferta.
Derechos Reservados AFmedios
