Colima.- El director General de Prevención y Reinserción Social de Colima, José Abel Saucedo Romero, descartó que un grupo de internos hayan iniciado una huelga de hambre, como circula en las redes sociales.Aclaró que esta situación se presentó luego de que se hizo una petición por parte de 15 personas privadas de su libertad, a quienes no se les autorizó recibir cena de parte de otros internos, cuyos familiares les llevan alimentos en el marco de las festividades de este mes, debido a que así lo establece la nueva ley nacional de ejecución de penas.
“Esos 15 internos, que se encuentra en el área de máxima seguridad y que son de otras entidades, estaban refiriendo que sus demás compañeros les querían compartir alimentos de la cena de navidad y año nuevo, sin embargo, se les aclaró que por mandato de ley no se permitirá, porque se llama compra de voluntades”.
Saucedo Romero, mencionó que las personas que plantearon dicha solicitud recibieron sus alimentos a la hora acostumbrada y los consumieron, por lo que insistió “que en el Cereso Colima no hay huelga de hambre”.
El funcionario estatal añadió que de manera personal, ha explicado a la población privada de su libertad que la ley nacional de ejecución de penas establece nuevas restricciones que la autoridad penitenciara hará que se cumplan sin ninguna clase de distinción.
“Se controlará aún más el ingreso de diversos productos, incluso comida, porque identificamos y consignamos a personas con droga, es decir, no es que quieran que les pasen azúcar o crema, es que quieren disfrazar esa azúcar con alguna clase de estupefacientes y hacer negocios”, indicó.
En el caso de las solicitudes especiales por razones de salud y para la venta en las tiendas (abarrotes) instaladas al interior de la institución, el Director General de Cereso, explicó que las compras de todos los productos las realizará el patronato de la institución.
«Si hay internos que no quieran acatar la normatividad a la que los funcionarios estamos obligados hacer cumplir, serán trasladados al Cereso de Manzanillo o a un penal federal, la sociedad pide que hagamos un trabajo de reinserción social y no que vengan a reproducir lo que hacía en libertad de manera ilícita”.