Colima.- La caseta de peaje ubicada en la carretera Armería–Manzanillo llegó para quedarse y parece que no se irá cuando menos hasta el 2029.
Un conflicto legal entre la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, el Gobierno del estado de Tlaxcala y la empresa que realizó un tramo carretero en esa entidad, originó que la concesión de peaje en la caseta de Cuyutlán se ampliara 9 años 5 meses – hasta 2029 – con cargo de los usuarios colimenses para recuperar una inversión carretera realizada en Tlaxcala.
El 9 de noviembre de 1990, el Gobierno federal del entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, por conducto de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) entonces a cargo de Andrés Caso Lombardo, otorgó el título de Concesión a favor de Promotora de Autopistas del Pacífico S.A. de C.V. – que en este reportaje identificaremos como La Concesionaria.
Ese título de concesión fue por un periodo de 9 años 3 meses, tiempo estipulado de común acuerdo por la SCT y La Concesionaria para recuperar la inversión del tramo carretero Armería – Manzanillo, pero éste título ha sido modificado y ampliado en cuatro ocasiones para llegar hasta el 2029.
La Concesionaria tiene el derecho para la construcción, explotación y conservación del tramo Armería–Manzanillo en el estado de Colima con una longitud de 37 kilómetros.
De acuerdo a los títulos otorgados a La Concesionaria y que obran en poder de AFmedios, sumando los años otorgados a favor de la empresa en las cuatro ampliaciones de la concesión, para el 2029 los colimenses habrán pagado 30 años por el derecho de circular por esa vía, tanto para saldar el costo carretero de 37 kilómetros Armería-Manzanillo y 9 años 5 meses más para saldar deudas de una obra carretera en el estado de Tlaxcala.
Uno de los argumentos para ampliar el periodo de concesión en las tres primeras veces fue el déficit en el tránsito vehicular que no permitía recuperar la inversión.
Pero la cuarta ampliación de la concesión es la que obliga a los colimenses a pagar 9 años 5 meses más de peaje para recuperar el gasto de una obra que no se hizo en Colima sino en Tlaxcala.
Aún así, el argumento para ampliar la concesión las tres primeras veces por no recuperar la inversión realizada en la carretera estatal es extraña. Esto si se toma en cuenta el nivel de tráfico por carga contenerizada, turismo y usuarios estatales que pagan este peaje. Actualmente tan solo el movimiento promedio de tráileres que circulan diario por esta carretera llega a los mil 500 con un costo de 746 pesos por transitar este tramo.
Sin embargo, la ampliación de los periodos de explotación de esta caseta por déficit de tránsito vehicular no es el punto medular en este trabajo periodístico.
A continuación te presentamos el contexto de las primeras tres modificaciones al título de concesión y la causa real de la cuarta, que provocó ampliar a 39 años el peaje en Colima.
El 17 de diciembre de 1992, se realizó la primera modificación a la concesión hasta llegar a los 14 años, contando a partir del 9 de noviembre de 1990, esto para compensar el supuesto déficit en el volumen de tránsito y la inversión realizada, entre otros argumentos.
Dos años más tarde, el 31 de mayo de 1994 la SCT permitió la segunda modificación a la concesión, a fin de extender su plazo de vigencia a 24 años 7 meses contados a partir del 9 de noviembre de 1990.
Esta vez, además de compensar el déficit de tránsito por la caseta de Cuyutlán, la modificación autorizaba a La Concesionaria, la construcción, operación, explotación (cobro), conservación y mantenimiento del libramiento Manzanillo con una longitud de 19 kilómetros.
Es decir, la SCT amplía el periodo para el cobro en Cuyutlán para compensar otra obra aún cuando el tramo carretero libramiento Manzanillo tendría cuota propia por 12 años.
Fue hasta el 2006 cuando la SCT otorgó la tercera modificación a la concesión -cobro caseta Cuyutlán- a fin de extender su plazo de vigencia a 30 años contados a partir del 9 de noviembre de 1990 es decir hasta el 2020.
Esto a cambio de excluir del objeto de la concesión el libramiento de Manzanillo por el cual los usuarios ya habían pagado 12 años.
Hasta ese momento el título de concesión ya le había asegurado a La Concesionaria rendimientos económicos por 30 años.
Pero en los antecedentes señalados en la cuarta y hasta ahora última modificación al título de concesión en poder de AFmedios, la SCT explica por qué autorizó el peaje de la caseta de Cuyutlán por 9 años 5 meses más, es decir hasta el 2029.
La dependencia federal señala que el 15 de marzo de 1990, la SCT otorgó a favor de Autopistas Concesionadas del Altiplano S.A. de C. V., en adelante identificada como AUCAL en este reportaje, la concesión para construir, explotar y conservar un subtramo de 22 kilómetros del tramo San Martín Texmelucan -Tlaxcala, de la carretera San Martín Texmelucan – Ocotoxcó, en los estados de Puebla y Tlaxcala.
En el documento, la dependencia expresa en el párrafo V anexo B que desde el inicio de operación de los tramos carreteros objeto de la Concesión San Martín Texmelucan se presentaron problemas que afectaron su desarrollo normal.
El 15 de octubre de 1993, la SCT, Gobierno del Estado de Tlaxcala, AUCAL, Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Caminos y Puentes Federales y Bancomer S.A. suscribieron un Memorándum de entendimiento del Proyecto Carretero San Martín Texmelucan -Tlaxcala – El Molinito, para solucionar los problemas que afectaban el desarrollo normal de la concesión.
Entonces la SCT y el Gobierno de Tlaxcala se comprometieron a resolver los problemas en un tiempo razonable.
Sin embargo, la problemática no fue resuelta como se planteó en la firma del memorándum por lo que AUCAL demandó en el juzgado noveno de Distrito en Materia Civil en el Distrito Federal bajo el expediente 107/2001 a la SCT y al Gobierno de Tlaxcala.
Mediante sentencia dictada en el juicio, se condenó a la SCT y al Gobierno de Tlaxcala cerrar los accesos a la carretera que AUCAL determinaba eran irregulares y le causaban perjuicios económicos.
AUCAL entonces reclamaba la ejecución de la sentencia y el pago de la cantidad de 3 mil 565 millones 780 mil 665 pesos como indemnización.
Pero mediante sentencia posterior dictada por el Primer Tribunal Unitario en Materia Civil y Administrativa del Primer Circuito en el Toca Civil 632/2008, se reconoció que el cierre de accesos ‘irregulares’ señalados por AUCAL ocasionaría repercusiones económicas a los pobladores de las zonas colindantes de los tramos carreteros referidos.
Entonces mediante oficio la SCT resolvió retirar los derechos a AUCAL y que ésta cediera la concesión San Martín Texmelucan con todos los derechos y obligaciones a La Concesionaria, la misma que tiene los derechos de peaje en la caseta de Cuyutlán, Armería.
La Concesionaria obtuvo también sin limitación, el derecho a recuperar la inversión que ya había realizado AUCAL, hasta ese momento pendiente de recuperar en su totalidad, junto con su rendimiento correspondiente.
Por estos derechos La Concesionaria (operadora de Cuyutlán) entregó a AUCAL un monto de mil millones de pesos como contraprestación por las referidas cesiones.
En el apartado de considerandos del documento que obra en poder de AFmedios, la SCT señala que de acuerdo con los estudios de aforo vehicular y proyecciones financieras realizadas sobre el tramo carretero San Martín Texmelucan – Tlaxcala – El Molinito, los ingresos esperados a partir de su explotación, resultan insuficientes para que La Concesionaria recupere el monto entregado a AUCAL como contraprestación por las cesiones referidas y para la explotación de dicho tramo carretero.
Por ello la SCT señaló que parte de dicho monto -400 millones de pesos- deberán ser recuperados por La Concesionaria a cargo de la concesión del tramo Armería – Manzanillo.
En adelante identificaremos a este déficit de 400 millones de pesos por la transacción de Tlaxcala como Monto Adicional.
En el considerando II de la Concesión, la dependencia, señala nuevamente que de acuerdo con los estudios realizados del aforo vehicular y proyecciones financieras realizadas sobre el tramo carretero Armería-Manzanillo, los ingresos esperados a partir de su explotación y el plazo faltante de la concesión resultan insuficientes para que La Concesionaria recupere en su totalidad la inversión realizada en el tramo Armería – Manzanillo, así como el Monto Adicional del tramo carretera de Tlaxcala entregado a AUCAL.
“Por lo que dicha inversión (tramo Armería- Manzanillo) y el Monto Adicional (400 millones) junto con su rendimiento, se tendrán que recuperar a través de una prórroga de la vigencia de la concesión, que la Secretaría (SCT) otorgará a solicitud de La Concesionaria…”, señala el considerando II.
La dependencia federal señala en el documento que La Concesionaria tiene derecho a recuperar el Monto Adicional con los recursos generados de la concesión (Armería-Manzanillo).
Por ello la SCT determinó necesario aumentar el plazo de concesión, 9 años 5 meses más a los 30 años ya autorizados en la tercera modificación del título de concesión.
Por lo que el peaje en la caseta de Cuyutlán se extendió a 39 años 5 meses contando a partir de 1990; es decir hasta el 2029.
Cuando se concretó esta modificación en el 2010, la SCT reconoce en la cláusula primera que a La Concesionaria aún le faltan por recuperar mil 730 millones 641 mil 884 pesos.
En la cláusula segunda, la SCT reconoce la cantidad de 400 millones de pesos a cargo de esta concesión (Armería–Manzanillo) recuperable, incluyendo el rendimiento correspondiente.
En la cláusula tercera, la Secretaría (SCT) sentencia el cobro de peaje a los colimenses para también recuperar los 400 millones que debían recuperarse en Tlaxcala.
“LA SECRETARÍA otorgará la prórroga de la vigencia de la Concesión tomando como base lo señalado en el Anexo B, por un plazo que sea suficiente para permitir la referida recuperación total de la inversión de La Concesionaria y del Monto Adicional, incluyendo las referidas en las cláusulas PRIMERA Y SEGUNDA, junto con sus rendimiento correspondiente, con cargo a los recursos generados por el tramo carretero Armería- Manzanillo”, sentenció el documento en poder de AFmedios.
El documento fue firmado el 19 de noviembre de 2010 por el Secretario de Comunicaciones y Transportes, Juan Francisco Molinar Horcasitas y por La Concesionaria lo hizo Alfredo Jorge García Ávila.
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