Manzanillo.- La operación de la caseta de Cuyutlán ofrece sus pros y contras consideraron representantes de cámaras empresariales así como inversionistas del ramo turístico.
Entrevistado al respecto, Carlos Hindman Bazán, delegado en la ciudad de Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), refirió que las ventajas que ofrece la autopista Manzanillo-Armería es en el aspecto de seguridad y rapidez, temas fundamentales y necesarios para la citada actividad.
Asimismo expuso que la carretera de cuota desfoga el creciente tráfico pesado que se registra en la región.
«Es decir que la mayor parte del tráfico de tráileres se está dando por esta caseta, lo que evita que ésta se vaya por la libre».
A la par sostuvo que ésta ofrece estímulos fiscales para los trasportistas que representan una ventaja para el gremio.
No obstante admitió que deben observarse las sugerencias del resto de los automovilistas, entre ellos el de los ciudadanos.
Por separado Francisco Medina Solana, delegado en el puerto de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), informó que esta vía significa ventajas indiscutibles para el perfil turístico del municipio, entre ellos el de rapidez y seguridad para los visitantes.
Medina Solana expuso que uno de los requerimientos del sector que representa, es la existencia de más y mejores opciones de este tipo para el turismo, ya que la mayor parte de estos llegan en automóvil.
Sin embargo el representante de la Canirac Manzanillo expuso que uno de los aspectos a mejorar es la clarificación de los tiempos de la concesión, tema que ha generado polémica y confusión entre la opinión pública.
«No estamos en contra de que se cobre, requerimos que haya carreteras eficientes pero quizá ese tema de la ampliación de la duración y ampliación de la concesión debe aclararse».
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