Uno de los sueños de mucha gente es el de comprarse una casa. Pero no muchas personas pueden hacerlo pagándola de una sola vez. Por suerte, existen las hipotecas. De esta manera la mayoría de gente puede comprar la vivienda que quiere.
En este artículo te vamos a explicar todos los aspectos importantes que necesitas saber sobre las hipotecas como, por ejemplo, todos los gastos que hay y quién puede conseguir una.
Qué es una hipoteca
Para dejar el concepto claro, primero vamos definir lo que significa hipoteca. Una hipoteca es un producto financiero o préstamo que te permite recibir un importe de dinero por parte de una institución financiera para poder comprar la vivienda o el inmueble que deseas. A cambio, tú garantizas al acreedor que serás capaz de devolver el dinero con los intereses que haya asociados a ésta a través de unas cuotas que, normalmente, son mensuales.
Cuáles son los usos que puede tener una hipoteca
Aunque se trate de un crédito bancario, las hipotecas no se pueden usar para cualquier cosa que tú quieras. En verdad, un banco o institución te la otorgará solo si la vas a utilizarla para:
- Comprar un terreno que forme parte de una propiedad privada.
- Construir una vivienda. Puede ser en un terreno de propiedad privada o comunal.
- Ampliar o remodelar la casa donde vives. En estos casos no te van a financiar todo el proyecto, sino que te darán hasta el 50% del avalúo total del departamento o la casa.
- Obtener liquidez. En el caso que ya tengas una vivienda, te podrán conceder un crédito hipotecario por este simple hecho. De esta manera lo podrás invertir en otras opciones.
Cómo funcionan las hipotecas
En el momento en que el banco te otorga el financiamiento suficiente para comprar una vivienda, debes tener en cuenta que en verdad es este el que compra la casa por ti. Cuando firmas el contrato final de la compra de la casa, la reunión se realiza en el banco o la institución financiera que te da el préstamo. En esta reunión acuden el propietario que quiere vender el inmueble, el agente del banco, tú como la persona que va a comprarla y el notario, porque todas las firmas se hacen ante la figura notarial.
Una vez firmado el contrato, el banco extiende un cheque con el dinero que necesitas para comprar el inmueble al propietario. En este preciso momento vas a firmar otro contrato con el banco en el que asumes que garantizas poder devolver la cantidad que te dejan más los intereses asociados que haya.
Para que no tengas dudas, hasta el momento en que no hayas devuelto todo el dinero la casa no será tuya, sino que será del acreedor. Esto es así porque cuando te conceden la hipoteca, es el banco o institución financiera quien compra la casa por ti. O sea, que hasta que no devuelvas el último peso ésta no será de tu propiedad.
Cuáles son los principales aspectos a tener en cuenta sobre las hipotecas
Hay una serie de puntos que debes conocer bien sobre los créditos hipotecarios. A continuación, te los vamos a explicar con más detalle.
El capital
Este es el dinero que le pedirás al acreedor para poder comprar la casa. O sea que, si una casa vale $2 millones de pesos, y te financian el 80%, estos $1,6 millones de pesos serán el capital que te conceden.
Pero, ¿no se financia la totalidad de una vivienda? La mayoría de los bancos o instituciones financieras que otorgan hipotecas acostumbran a dar un 80% del importe de lo que cuesta la casa, o sea que el restante 20% lo tienes que pagar tú. Eso significa que debes tener unos ahorros para poder pagar la parte restante, además de los gastos que vamos a explicar más adelante en este artículo.
El plazo de devolución
Este es el tiempo en que se tiene que devolver el dinero al acreedor. El pago de la deuda se acostumbra a hacer en cuotas mensuales.
En México el plazo máximo de devolución acostumbra a ser de un máximo de 20 años, pero puede que haya casos en que este sea mayor o menor. Hay una serie factores que van a determinar el tiempo en que podrás devolver el crédito hipotecario. Algunos de estos son la edad, economía o el tipo de interés.
Los tipos de interés de una hipoteca
El interés, entendido como porcentaje que se tiene que pagar a la institución financiera o banco que presta el dinero, es el porcentaje que marca lo que se tiene que pagar cada mes.
Hay tres tipos diferentes que, resumidos de forma breve, son los siguientes:
- Hipoteca fija: el interés es fijo, por lo que se mantendrá a lo largo de toda la hipoteca.
- Hipoteca variable: el interés varía de forma periódica tomando como referencia ciertos datos económicos.
- Hipoteca mixta: el interés es fijo y variable. Normalmente los primeros años es fijo, para cambiar a variable después.
¿Hay límites de edad para pedir una hipoteca?
Aparte del mínimo legal (que acostumbra a ser de 18 años para cualquier tipo de préstamo), las hipotecas no tienen ninguno. Eso sí, dependiendo de la edad que se tenga, puede que los plazos cambien o, también, los requisitos para conseguir el financiamiento:
- Si tienes entre 18 y 25 años, hay algunos bancos que te pueden otorgar este crédito hipotecario. Los requisitos que te van a pedir serán bastante exigentes, pero eso sí, puede que el plazo para devolver la hipoteca sea superior a los 20 años.
- Si tienes entre 26 y 39 años, será más fácil que te otorguen una hipoteca que si te encuentras en la franja de edad anterior. Eso sí, no todos los bancos te dejarán devolver el dinero en más de 20 años.
- Si tienes entre 40 y 70 años, normalmente los requisitos no serán muy exigentes. Eso sí, en el caso de tener 50 o más es raro que te concedan una hipoteca a 20 años, sino que el plazo será inferior. Además, lo más seguro es que te obligarán a contratar otro producto, aparte del crédito hipotecario, como puede ser un seguro de vida o un plan de pensiones.
Qué gastos se debes asumir en el momento de pedir una hipoteca
Aparte del dinero que te conceden y de los intereses asociados, también tendrás que afrontar una serie de gastos y comisiones que son obligatorios:
- El estudio socioeconómico.
- La comisión de apertura.
- La administración de adquirir la vivienda.
- El seguro de vida.
- El seguro contra daños que protege el inmueble.
Requisitos generales para que te concedan una hipoteca
Es verdad que pueden cambiar según la entidad en que la pidas, pero, por lo general, estos son los que te pedirán:
- Un comprobante de antigüedad de tu trabajo.
- Un comprobante de ingresos estables.
- El original y las copias de la declaración anual de ISR.
- La copia de los planos arquitectónicos del inmueble que se quiere adquirir.
- La copia del contrato de promesa de compra venta del inmueble que se quiere adquirir, celebrado entre el solicitante y el propietario de este.
- Otros que van a depender de la institución o el banco donde pidas la hipoteca.
Como puedes ver, comprarte la casa de tus sueños puede ser más fácil gracias a una hipoteca. Esperamos que, tras estas líneas, tengas los conceptos más claros. Eso sí, si quieres ampliar la información sobre este tipo de préstamos, te recomendamos que te leas el siguiente artículo sobre hipotecas. Aparte de aportar más información, también podrás conocer algunos créditos hipotecarios que te pueden resultar interesantes.