Saúl Ibarra Ramos, quien actualmente cursa el segundo semestre de Licenciatura en Música en el Instituto Universitario de Bellas Artes (IUBA) de la Universidad de Colima, bajo la tutela de Anatoly Zatin y Vlada Vassilieva, ganó el segundo premio en el Concurso Nacional Angélica Morales – Yamaha, el certamen más importante en disciplina musical de nuestro país.
Este fin de semana se realizó la etapa final en la sala principal del Palacio de Bellas Artes, en la que cuatro finalistas (de un total de 37 participantes en la primera etapa) actuaron como solistas al frente de la Orquesta Sinfónica Nacional, bajo la dirección del maestro José Guadalupe Flores.
Saúl Ibarra, de 18 años de edad, fue uno de los pianistas más jóvenes en la historia del concurso. Su interpretación del Concierto No.1 para piano y orquesta de Franz Liszt, lo posicionó como el favorito de la noche, lo cual fue confirmado por una prolongada ovación de un sector del público y por posteriores comentarios de destacadas personalidades de la música que asistieron al evento.
Por su parte, el pianista Pablo Suaste Cherizola, ex alumno de Zatin y Vassilieva en el IUBA (2010-2013), quien posteriormente realizó estudios en la Universidad de Chicago, obtuvo el tercer premio tras ejecutar el Concierto No.2 de Sergei Rachmaninov.
El primer lugar fue para el pianista Rachid Bernal, egresado de la Escuela de Música “Vida y Movimiento” Ollin Yoliztli.
Este resultado, dijeron los tutores de ambos jóvenes, “reafirma la consistente calidad en formación pianística que se viene ofreciendo en la Universidad de Colima”.
La primera participación de la UdeC en este concurso fue en 2004, cuando la entonces alumna y ahora catedrática Vlada Vassilieva también obtuvo el segundo premio. A lo largo de los últimos 20 años, alumnos del IUBA, en distintas disciplinas, han sumado más de 120 premios en concursos nacionales e internacionales.
