El rector de la Universidad de Colima, Miguel Ángel Aguayo López, y el delgado del Instituto Mexicano del Seguro Social, Miguel Becerra Hernández, estuvieron presentes en las instalaciones del Polideportivo del campus central Colima donde se aplicó, por séptimo año consecutivo, el Examen Médico Automatizado (EMA) a los alumnos de primer ingreso a la casa de estudios.
Fueron alrededor de nueve mil los alumnos recién llegados a quienes se les practicó ese examen, que es una revisión empleada por la U de C como estrategia para detectar oportunamente problemas que signifiquen un riesgo inminente para la salud y desarrollo de los jóvenes universitarios, que les pudiera, en un momento dado, impedir un adecuado rendimiento académico al verificar su buen estado de salud físico y mental, como apuntó el coordinador de los Servicios Médicos de la institución, Víctor Zepeda Pamplona, al ser entrevistado durante el examen.
Señaló, además, que la idea es conocer el perfil de cada uno de los estudiantes, para lo cual la Universidad se apoya en un instrumento validado por la Organización Panamericana de la Salud, que fue diseñado e implementado por la UNAM. “A través del EMA se busca obtener información sobre la salud física, psicológica, estilo de vida y del ámbito familiar de cada uno de los muchachos. Esto permite concentrar una serie de elementos de información para elaborar perfiles de predicción de conductas que pudieran poner en riesgo su salud”.
El funcionario refirió también que los resultados del EMA permiten observar los niveles que existen en diferentes rubros como obesidad, desnutrición, hipertensión, diabetes, consumo de alcohol, tabaco y drogas, infecciones de transmisión sexual, embarazos no planeados y violencia sexual y familiar.
Para ilustrar esos conceptos, explicó a los alumnos que el cuestionario que se aplica permite conocer el nivel de salud de cada estudiante desde preparatoria hasta posgrado, amén de saber cuáles son los factores que los pueden hacer vulnerables a su salud y los que los pueden proteger, en una acción que va unida con las que se realizan en los módulos PREVENIMSS que el Seguro Social y la U de Colima han instalado en cada una de las delegaciones de esta última.
Junto con el examen escrito se realizan otra serie de acciones como verificar la agudeza visual, de peso y talla signos vitales y la aplicación de otras de carácter preventivo que se verifican con el apoyo del IMSS.
Zepeda Pamplona agradeció, igualmente, la participación del Instituto para mantener a una población saludable, con estas pruebas que se han aplicado a todos los alumnos de primer ingreso de nivel medio superior, licenciatura y posgrado.
Con la finalidad de conocer el desarrollo de este diagnostico, estuvieron presentes directivos de la Universidad Juárez de Durango, cuyo director de Servicios Universitarios, José Francisco Solís, manifestó que existe gran interés de las autoridades de su institución el que se pueda replicar en los alumnos duranguenses el programa de Universidad Saludable de la U de C.
Por su parte, Raymundo Rodríguez, responsable de un programa similar en la misma UJD habló de su particular interés en conocer los pasos que se siguen para sistematizar y poder saber el perfil de los alumnos y a partir de ese diagnostico tener la seguridad de qué acciones preventivas se deben establecer en los diferentes planteles.
Respecto al trabajo realizado en la U de Colima en este sentido, destacó la coordinación con que se lleva a cabo para este diagnostico, así como la experiencia y el liderazgo de la Universidad de Colima como promotora de la salud.
Finalmente, el visitante habló de la posibilidad de coordinar el programa de Universidad Saludable con la UJD, de manera que les permita conocer el perfil físico y mental de sus alumnos y a través de ellos poder diseñar las estrategias de prevención, con el fin de contar con una población sana y que mantenga un perfil saludable.