Escollera
Por Edgar Cazares
*Ciertamente suelen abundar pseudo líderes políticos que acostumbrados están a hacer leña del árbol caído y lucrar con la necesidad de la gente, especialmente de los más necesitados.
Son esa fauna política pues que busca llevar agua a su molino como se dice comúnmente. No obstante en el caso de mi amado puerto sí que hay voces genuinas que reclaman más apoyo o al menos más solidaridad de parte del Ayuntamiento. Hace algunos días reconocimos lo interesante que es el hecho de que se hayan habilitado cocinas comunitarias. Pero sin duda, reconociendo tal acción, hace falta más.
He visto como en otros municipios del estado se han emprendido programas sí sencillos pero que en algo sirven para aquellos que han perdido sus trabajos o que se ven orillados, por aquello del aislamiento social o por ser parte de los grupos más vulnerables al COVID-19, a no salir ante el riesgo que la epidemia representa. En algunas localidades del estado las autoridades municipales reparten despensa, en otros dan apoyos económicos o préstamos, entre otros tipos de detalles. Aquí “solo” se han habilitado cocinas comunitarias. Y entrecomillo el solo porque me da la impresión de que se puede hacer algo más.
Manzanillo maneja un presupuesto superior a los mil 200 millones de pesos –por lo menos este 2020- y suena muy rácano no diseñar otro esquema para aliviar la situación de quienes comprueben una necesidad económica o alimentaria. Peor aún, esa falta de solidaridad o mayor sensibilidad de la comuna alimenta las posibilidades de esa fauna que nada más está esperando la coyuntura, la desgracia o el caos para hacer de las suyas. Porque en política las omisiones suelen llenarse con oportunismos y protagonismos estériles.
*Mi felicitación pública a todos los trabajadores de salud que están en esta primera línea de batalla contra el coronavirus. No solo se muestran valientes, sino comprometidos con la salud de los suyos y de gente que en su vida han visto. Ojala una vez pasando, dios quiera que así sea, esta epidemia se valore y, mejor aún, se les remunere en mayor cantidad económica como reconocimiento a esa labor fundamental que hoy hacen.
APUNTES DESDE LA COSTA
*Me adelanto unos días para felicitar a todas las mamás y también a quienes tienen la dicha de tenerlas aún a su lado. El próximo domingo es su día y aunque no se podrá hacer las fiestas como ellas merecen por lo menos hay oportunidad de recordar su papel tan importante en nuestra sociedad.
*En lo personal puedo decir que perdí a mi madre, Doña Carmen Martínez, hace 3 años. Sin embargo no pasa un solo día sin que la recuerde. Cada paso que doy, cada rincón que recorre, invariablemente me viene a la mente sus consejos, las vivencias y, porqué no, los regaños que de vez en cuando merecí de su parte. Quizá suene exagerado pero mi madre se desvivió en cariños, buenos tratos y mejores ejemplos para con un servidor. Un buen día –hace quizá unos diez años-en una de mis acostumbradas y frecuentes visitas a mi amado barrio, la Bellavista, me detuvo intempestivamente una estimada vecina para confesarme, con cierto dejo de humor, lo siguiente “oye, tu mamá debe quererte mucho, ella te ve casi como un Bradd Pitt”.
El comentario me arrancó una sonora carcajada pero no me extrañó –el comentario claro porque compararme con un artista de Hollywood es evidentemente un despropósito-. Doña Carmen se desvivía en demostrarme su afecto. No era en vano, mi familia me platicó varias veces lo difícil que fue mi llegada al mundo. Cuando ella murió claro que sentí un gran pesar pero lejos de buscar culpables o cuestionar los designios del señor se me ocurrió únicamente agradecer al destino haberme prestado, por más de 40 años, a tan hermoso ser como fue mi madre. Tampoco puedo mentir, su pérdida ha generado en mí un terrible vacío. Sin embargo es un dolor con el que he aprendido a convivir por todas las buenas cosas que me dejó.
Sus comentarios por favor a edgar.cazares.afmedios@gmail.com
