El día de ayer, un conductor en un Honda Civic se atrevió a rosar el carísimo Ferrari conducido por la sensación pop de 17 años, Justin Bieber en San Francisco. Un oficial de policía de Los Ángeles comentó a AP que el accidente fue «una colisión menor», y otras fuentes confirmaron a TMZ que el Honda apenas si «tocó» el lateral del vehículo piloteado por Bieber –evidentemente mientras su conductor intentaba evadir el auto de Bieber en un estacionamiento bajo techo, como reporta E!
No hubo daño visible en ninguno de los vehículos, nadie salió herido y las autoridades que llegaron a la escena ni nsiquiera se molestaron en levantar un reporte. ¡Caso cerrado!… Excepto que estamos hablando de Justin Bieber aquí –quien ni siquiera puede ir al centro comercial a promocionar un perfume sin que haya un incidente mayor. Bieber ha escapado ileso de dichos incidentes, y el dueño del Honda porbablemente esté suspirando tranquilo de que ése haya sido el caso. El Civic (cuyo precio es de $15,805 dólares) ni siquiera ralló el Ferrari modelo F430 (cuyo precio es de $186,925 dólares).
Bieber fue primer visto en su Ferrari F430 (color negro mate) el año pasado. Los accesorios del coche estándar incluyen un motor de 32 válvulas, alarma de pánico (que puede servirte de mucho si eres un rompecorazones adolescente), y la habilidad para llenar «todos tus receptores cerebrales del placer con maero automovilístico.» Su velocidad máxima es de: 322 kilómetros por hora.
No podemos juzgar a la estrella juvenil por querer un juguete (entendido, uno que cuesta casi tres veces la media de los ingresos de una familia de cuatro): En los últimos meses solamente, le han aventado huevos al escenario en Australia, un hacker le borró sus videos de YouTube, y su portada en la revista Vanity Fair no se vendió nada en los puestos de revista. Incluso ha habido un poco de crimen relacionado con Justin Bieber flotando en al aire –un hombre fue recientemente arrestado por robarse una figura de cartón de la estrella de un centro comercial, y una señal de tránsito de Justin Bieber en Texas desapareció misteriosamente.
