Ciudad de México.- La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) presentó “Remedios Solidarios”, una iniciativa para preservar los puestos de trabajo en las empresas afectadas por la crisis económica, derivada del COVID-19.
Con estos nuevos “Remedios” se agregan dos medidas más: seguro y bono solidarios, para que las empresas mexicanas tengan solidez para enfrentar el panorama financiero actual.
Al igual que el Salario Solidario presentado el pasado 4 de junio, estos mecanismos buscan se tripartitas, es decir que los fondos provengan de los trabajadores, gobierno y empresas.
Coparmex hizo un llamado al Gobierno Federal para considerar estas alternativas, las cuales tendría un costo aproximado de 204 mil millones de pesos (equivalente al 1 por ciento del PIB) y para financiarlas proponen la adquisición de deuda pública, pues consideran que el país cuenta con un nivel de endeudamiento adecuado que lo permite en esta situación de emergencia.
“De no optar por la adquisición de deuda, proponemos la reorientación del gasto público en obras que no son esenciales en la situación actual como el aeropuerto de Santa Lucía, la refinería Dos Bocas y el Tren Maya.”
Salario solidario
Mediante un comunicado, Coparmex recordó que el Salario Solidario es una percepción económica menor o igual al salario con el que contaba el trabajador, que estaría compuesto por las contribuciones del gobierno, las empresas y los trabajadores.
Esta propuesta tendría el siguiente esquema: el gobierno pagaría una parte del salario del trabajador formal, cuya proporción dependerá del nivel salarial del mismo, el patrón pagaría otra proporción del salario y el trabajador acordaría recibir una proporción menor del mismo, excepto aquellos que ganen entre 1 y 3 salarios mínimos.
Seguro Solidario
Pretende ser un apoyo equivalente a un salario mínimo general, de 3 mil 696.6 pesos, para todos los trabajadores formales que hayan perdido su empleo.
Mediante esta propuesta se otorgaría este apoyo a todos los trabajadores formales que hayan perdido su empleo entre el 15 de marzo y el 30 de septiembre, duraría seis meses como máximo o menos si el trabajador encuentra otro empleo antes.
“Su costo estimado, para brindar apoyo a 1.5 millones de trabajadores formales desempleados, es de 31 mil millones de pesos (0.1% del PIB).”
Bono solidario
Consiste en una contribución del gobierno, equivalente a una proporción del salario del trabajador contratado, por un periodo de tres meses.
Cualquier empresa podría solicitar dicho bono para los trabajadores que contrate de julio a noviembre de 2020 y se determinará a partir del número de nuevas plazas generadas en la empresa, con respecto al mes anterior.
El patrón se comprometería a no despedir al trabajador contratado en, al menos, seis meses, pues en caso de no cumplir tendría que reembolsar el bono recibido.
Para los nuevos empleos creados que ganen menos de dos salarios mínimos, el gobierno contribuirá con un bono equivalente a un salario mínimo por tres meses.
Los que ganen entre dos salarios mínimos y menos de tres salarios mínimos, el gobierno contribuye con un bono equivalente a dos salarios mínimos por tres meses. Los nuevos empleos que ganen entre tres salarios mínimos o más, el gobierno contribuye con un bono equivalente a tres salarios mínimos por tres meses.
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