¿QUÉ VIENE?
Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ
Cuando hace un par de meses era una peregrina idea, hoy las alianzas políticas están en boca de todos quienes están interactuando en la búsqueda de posiciones, particularmente la gubernatura.Y qué bueno. Definitivamente las complejidades que se están enfrentando, no solo por las últimas medidas del gobierno federal antes de la pandemia, si no también las consecuencias de ésta, obligan al diseño de estrategias que no pueden involucrar un solo criterio ni un solo interés.
Hasta los que se sienten encarrilados en la ola amloísta y sienten seguro el triunfo, andan viendo cómo se agrupan, aunque no necesariamente entre ellos.
La otra denominación, esa que por marca se presume ciudadana, va recorriendo calles y avenidas, colonias y barrios, sumando a sus filas ciudadanos por nacimiento, que no por labor. Lógico que se puede alegar que todo aquel nacido en territorio nacional, mayor de edad y con un INE es ciudadano. Sin embargo, pretenden confundir al público con una acepción distinta a la necesaria.
El resto de los tradicionales, PAN, PRI, PANAL y PRD, comienzan a encontrar sus coincidencias, tendiendo también a encontrar esos puntos en común y decidiéndose por construir una candidatura y proyecto común.
Uno de los principales retos es definir el perfil de quien encabece esta alianza. Lo he mencionado antes, es un momento social y ello nos ofrece la oportunidad de apuntalar a un personaje que tenga claridad en los retos que están enfrente, pero que al mismo tiempo no haya perdido la sensibilidad de saber lo que es tener que trabajar para vivir dignamente. Que además de conocer las realidades del estado, no esté alejado del sentir natural de los habitantes del estado.
Mucha conciencia debemos tener, pues los usos y costumbres no van por ese lado. Hay que alzar la voz y que se escuche fuerte y claro: que no pretendan vendernos espejitos.
Esa postura, ese mensaje, la única forma de hacerlo sentir es juntos.
