Dos días después de los hechos que provocaron la muerte de dos alumnos de la Escuela Normal de Ayotzinapa, las autoridades estatales y federales han presentado diferentes pruebas para deslindar su responsabilidad en el enfrentamiento.
El vocero del gobierno de Guerrero, Arturo Martínez Núñez, entregó el martes a medios de comunicación un video de siete minutos en el que, según la explicación de las autoridades estatales, se observa cómo policías federales disparan al aire, detienen a algunos de los jóvenes y los golpean.
Martínez Núñez dijo que el video, que en total tiene una duración de una hora, ya fue entregado a la Procuraduría General de la República (PGR), la procuraduría estatal y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Sin embargo, José Ramón Salinas, director de Comunicación Social de la Policía Federal, aseguró que en ese video es imposible distinguir entre policías federales, ministeriales y estatales porque “puede darse la confusión de uniformes”.
El funcionario federal presentó un peritaje de trayectoria balística hecho por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) que concluye que los disparos fueron hechos “por el costado izquierdo” de donde estaban los jóvenes manifestándose.
“Es por el costado izquierdo, en este caso de donde estaba uno de los jóvenes que pierde la vida, de donde se hacen los disparos. Lugar donde se encontraban los policías ministeriales vestidos de civiles y también policías estatales”, detalló Salinas en entrevista con WRadio.
José Ramón Salinas aseguró que fueron los policías estatales y ministeriales los que entraron “por la calle transversal” para intervenir en la manifestación y agregó que deberán ser las autoridades locales las que determinen qué elemento local realizó los disparos.
Otras contradicciones
La SSP justificó su presencia en la protesta de los normalistas porque bloquearon la Autopista del Sol, la principal vía que conecta al Distrito Federal con Guerrero y que es custodiada por elementos federales.
“La Policía Federal no llegó en primera instancia (al lugar de la protesta). Las pláticas no avanzaban, no tenemos la autoridad para iniciar el diálogo con los manifestantes, ya estaban otras corporaciones y nosotros estábamos a la distancia de donde se realizó la manifestación”, dijo José Ramón Salinas.
La versión del gobierno de Ángel Aguirre Rivero es que la Policía Federal llegó primero al lugar de los hechos porque la autopista “es zona de su competencia”, mientras que los elementos estatales sólo llegaron con un equipo antimotines para apoyar el operativo federal, “corporación que en todo momento estuvo al mando de la operación por ser de su jurisdicción exclusiva”.
El gobernador guerrerense cesó la tarde del martes al procurador General de Justicia, Alberto López Rosas; al secretario y subsecretario de Seguridad Pública, Ramón Almonte y Ramón Arreola, respectivamente; y al director general de la Policía Investigadora Ministerial, Antonio Valenzuela Valdez.
La Procuraduría General de la República inició la investigación de los hechos. El martes informó que se tomaron muestras de las armas de cinco policías ministeriales para determinar si éstas tienen vínculo con los disparos que provocaron la muerte de dos normalistas.
Además, hay un estudiante detenido, Gerardo Santiago Peña, que es investigado por presuntamente portar un AK-47 y disparar en al menos cinco ocasiones durante la manifestación.
Sin embargo, integrantes de la Escuela Normal denunciaron que Gerardo Santiago Peña fue detenido, torturado y obligado a que tomara un AK-47 y disparara, con la finalidad de que en las pruebas de balísticas se pudiera probar que accionó el arma contra uniformados.
Este martes la Procuraduría General de Justicia del estado liberó a una veintena de estudiantes normalistas que fueron detenidos durante el enfrentamiento del lunes.
El proceso fue inspeccionado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos, para conocer las condiciones en que fueron liberados.
En la protesta del lunes fallecieron los estudiantes Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, originarios de Atoyac de Álvarez y Tixtla de Guerrero. Las otras personas que fueron detenidas ya fueron liberadas y hay al menos otros cinco heridos, uno de ellos de gravedad.
Con información de CNN