Un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) reveló que la inequidad entre hombres y mujeres en el acceso al empleo y las condiciones de trabajo es mayor de lo que se creía, y que los esfuerzos de los últimos 20 años para reducir ese desequilibrio han sido muy lentos.

Un nuevo indicador de la OIT que captura a todas las personas que buscan trabajo muestra que para las mujeres es mucho más difícil encontrarlo y precisa que el 15% de las mujeres en edad de trabajar quisiera hacerlo pero no tiene empleo, en tanto que en los hombres, esa cifra es de 10,5%.

La agencia laboral indicó que la brecha de género en el mundo del trabajo no ha cambiado desde 2005 y destacó que es especialmente grave en los países en desarrollo, donde la proporción de mujeres que no encuentran empleo llega casi a 25%, frente a 16,6% de los hombres.

El estudio también subraya que las responsabilidades personales y familiares, incluido el trabajo no remunerado, afectan desproporcionadamente a las mujeres, les impiden buscar activamente un empleo y las excluyen de los datos de desocupación, por lo que la cantidad sería mucho más elevada.

La OIT recalcó la importancia de mejorar la participación de las mujeres en la esfera laboral, de ampliar su acceso al empleo en todos los campos y de poner fin a las diferencias de calidad en el empleo que enfrentan las mujeres.