¿QUÉ VIENE?
Por: SEAN OSMIN HAMUD RUIZ
Todo parece indicar que nuestra estrategia estará basada en el antiguo testamento.
Como en el libro de Samuel, amparados en nuestra fe, confiando en la grandeza de nuestro espíritu y en el favor de lo divino, armados de nuestra honda y un par de guijarros, humildes como David, pretenderemos vencer al gigante naranja, antes Goliat.
La imposición del 25 % de aranceles a las importaciones mexicanas en USA, véase como se vea, representa fracturar un pilar fundamental a la actividad económica del país.
Además de lo que impactará en el comercio cotidiano con nuestro vecino y teniéndolo en cuenta como uno de los engranes más importantes que mueven la maquinaria financiera nacional, ahora sí tenemos que meter en los cálculos diversos escenarios que contemplen una línea de tiempo y los impactos de esta medida en el futuro.
Creer que “pagando con la misma moneda” conseguiremos una corrección de esta medida es pecar de inocencia.
A Trump no le importa generar inflación, desabasto o complicar líneas de producción. Capitalista salvaje, como lo es, seguramente piensa que un periodo de sufrimiento en la planta industrial y comercial en aquella latitud provocará que sus habitantes busquen la adaptación y resiliencia que conducirá a América a ser grande otra vez.
Pero además cuenta con la opción ideal en su sentir. Doblegar voluntades extra fronteras y consolidar su posición como el verdadero líder del mundo, que pone y dispone según su visión. Conseguiría que se haga su voluntad.
En su perspectiva, juega con una pirinola que en todos sus lados dice toma todo.
Tardíamente la presidenta llama a la unión nacional, a cerrar filas y a apoyarla en este frente. Además de sonar hipócrita después de la actitud que ha tomado en estos primeros meses de su gestión en diversos temas como la reforma al poder judicial, la desaparición de los organismos autónomos, la denostación a las dirigencias partidistas de la oposición, etcétera, sigue sin hablar claro respecto a los dos problemas torales que nos pusieron en esta situación: el problema de la migración y el problema del narcotráfico.
Al día de hoy, ni ha mostrado un plan serio de contención y corrección, mucho menos ha convocado a que, justo, en unión, todos los sectores de la sociedad pudiéramos contribuir al diseño de esa estrategia.
Parece que continúa convencida de que va a encontrar ollas llenas de oro y mágicas soluciones siguiendo su camino hacia Palenque al final del ARCOÍRIS.
MICROCUENTO
Cada vez que lo he intentado, caigo en la frustración. No es la primera y además, ha sucedido a lo largo del tiempo. Ni los años o experiencia han conseguido prepararme a lograrlo. Creo que es momento de decidir cejar en mis aspiraciones. Nunca podré ensartar el hilo en la aguja a la primera.