COLIMA.– En el marco de la Semana Santa, el templo de Nuestra Señora de la Merced en la capital colimense ha preparado una intensa jornada de actividades litúrgicas, de recogimiento y tradición religiosa para conmemorar la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
El padre Antonio Aguirre Ruiz, párroco del templo, compartió el programa y el profundo significado que encierran estos días para la comunidad católica.
“Desde el Domingo de Ramos dimos inicio a esta semana que llamamos santa, con una gran peregrinación por la calle Madero y la posterior misa con bendición de ramos en el templo. Fue muy buena la participación de la gente, que acudió con sus palmas, como signo de fe”, expresó el párroco.
Jueves Santo: Día del sacerdocio, la eucaristía y el servicio
El programa continúa con lo que se conoce como los días mayores de la Semana Santa. Para este Jueves Santo, la parroquia vivirá uno de los momentos más significativos del calendario católico.
“Celebramos tres grandes regalos que nos dejó Jesucristo: el sacerdocio, la eucaristía y el servicio. Durante la misa del lavatorio de los pies se recuerda que Jesús vino a servir, no a ser servido. Al finalizar la misa, se instala el monumento al Santísimo, una tradición hermosa que invita a la visita de los siete templos”, explicó el sacerdote.
El padre Aguirre hizo un llamado a no dejar morir esta costumbre religiosa.
“Es un gesto sencillo pero profundamente espiritual: ir a siete templos a visitar a Jesús en el Santísimo y dedicar un momento de oración y veneración”.
En la Merced, grupos de feligreses se turnan en la adoración al Santísimo desde que termina la misa hasta cerca de las 10 u 11 de la noche.
Viernes Santo: Viacrucis, adoración de la cruz y Marcha del Silencio
Para el Viernes Santo, las actividades comienzan desde temprano. A las 9:00 de la mañana se llevará a cabo un Viacrucis en el Jardín Núñez, donde las 14 estaciones estarán distribuidas por todo el jardín para meditar los últimos pasos de Jesucristo antes de su crucifixión.
Por la tarde, a las 6:00, se celebrará la Adoración de la Cruz dentro del templo. Posteriormente, alrededor de las 7:30 de la noche, iniciará una de las actividades más emblemáticas y sentidas de esta parroquia: la Marcha del Silencio.
“Con la marcha acompañamos a la Virgen María en su dolor, desde que bajaron a Jesús de la cruz hasta su sepultura. Es un acto de reflexión profunda. Vamos en silencio, con penitentes, mujeres vestidas de negro, tambores, cadenas y el Santo Sepulcro. Es una tradición que viene desde las Españas, y que aquí sigue viva”, relató el párroco.
Al término de la procesión, se realizará en el templo el Rosario del Pésame, una ceremonia en penumbras, iluminada únicamente por las lámparas de los asistentes, en la que se medita el sufrimiento de la Virgen María. Cada misterio del rosario estará acompañado de una carta de distintos sectores de la sociedad: niños, jóvenes, matrimonios, personas de la tercera edad y varones, quienes se solidarizan con el dolor de la Madre de Jesús y reflejan, a través de sus palabras, las problemáticas que enfrentan en la actualidad.
“También queremos recordar a las madres buscadoras, que como María han perdido a sus hijos. Con ellas también queremos hacer comunión en el dolor”, subrayó.
Sábado de Gloria: Celebración de la Resurrección
El Sábado Santo, día culminante para la fe cristiana, se celebrará la Vigilia Pascual, considerada por la Iglesia como “la madre de todas las misas”. Inicia a las 7:00 de la noche con la bendición del fuego nuevo, del cual se enciende el Cirio Pascual, símbolo de Cristo resucitado.
“Es una celebración muy especial, llena de signos y momentos que nos invitan a reflexionar sobre la resurrección de Cristo. Todo el templo se va iluminando poco a poco con las velas de los fieles, simbolizando cómo la luz de Cristo vence las tinieblas del mundo”, explicó el padre Antonio.
Domingo de Resurrección
El Domingo de Pascua, las misas regresan a sus horarios habituales: a las 12:00 del día y a las 7:00 de la tarde.
Finalmente, el párroco hizo un llamado a vivir estas fechas en comunidad, con el recogimiento y solemnidad que merecen.
“Invitamos a que vengan en familia, que participen activamente. A quienes quieran sumarse a la marcha del silencio, sugerimos venir de negro o con ropa sobria, en señal de luto por la muerte de Cristo. Pero sobre todo, con el corazón dispuesto a reflexionar, orar y compartir el dolor de María”.
El programa completo está disponible en una cartulina y manta colocadas en la entrada del templo, así como anunciado en cada misa dominical. La comunidad de La Merced espera, como cada año, una gran afluencia de fieles durante esta Semana Santa.