Colima.- Integrantes de diferentes organizaciones de reporteros y periodistas de Colima montaron este día una guardia de honor en el monumento de “Francisco Zarco” en el jardín “Libertad de Expresión”, y pidieron a las autoridades generar un protocolo consensuado para la cobertura de hechos violentos.
En el marco del día mundial de la Libertad de Prensa, periodistas y reporteros colimenses lamentaron las agresiones que han sufrido trabajadores de los medios de comunicación tanto en Colima como en el país.
Por su parte, Karla Gómez, presidenta del Club de Reporteros manifestó su solidaridad con Sergio Uribe, quien fue detenido por elementos policíacos en días pasados mientras cubría una nota del orden policiaco.
“Lo que va a defender el Club de Reporteros es el trato que se le dio al compañero Sergio Uribe en el momento que le pedían (las autoridades policiacas) que se retirara (del lugar donde cubría la nota)”.
Dijo que se va a pedir a las autoridades para delimitar los protocolos de seguridad hacia los periodistas en el cumplimiento de “nuestro trabajo”.
También se solidarizo con los familiares de Regina Martínez, reportera de Veracruz que fue asesinada en días pasados. “Es un hecho reprobable”.
Mencionó que cuando acallan a un periodista o reportero o los agreden en sus derechos “están agrediendo y acallando al pueblo; con disciplina, integridad y mucha responsabilidad, todos y cada uno de nosotros somos la voz del pueblo, del ciudadano que no se puede manifestar y utilizan nuestro trabajo en la confianza que nos otorgan”.
Lamentó que ya sean 114 asesinatos de reporteros y periodistas en México.
Por su parte, el periodista Pedro Zamora pidió no pasar por alto toda ese tipo de agresiones que muchas veces se realizan de manera directa, “que no llegan al asesinato, pero también de manera sutil en contra de la libertad de expresión”.
Recordó que el caso de Sergio Uribe, quien sufrió atropellos de parte de las autoridades policíacas del Estado mientras cubría su trabajo; y dijo “podemos estar de acuerdo no de acuerdo los compañeros del gremio con las formas de trabajar de cada uno de nosotros, cada quien tiene su manera de trabajo, pero en el fondo lo que nos une, lo que no es común, tratamos de ejercerlo con libertad, con profesionalismo y el hecho de que se nos agreda, nos está agrediendo a todos y todos debemos sentirnos agraviados por esto”.
“Tampoco podemos verlo como un caso aislado porque si lo vemos en el contexto de la actuación gubernamental hacia la prensa, nos daremos cuenta de que todo esto es parte de una política represiva hacia la prensa en el Estado de Colima, el caso de Sergio fue la gota que derramo el vaso, pero lo que le pasó a él nos puede pasar a cualquiera de nosotros”, agregó.
Exigió a las autoridades reglas claras, que se puedan establecer de manera conjunta, “para poder ejercer nuestro trabajo periodístico, nuestro oficio informativo en los casos de violencia, sin que haya el riesgo de que seamos abusado, atropellados por esa situación”.
“Reconocer que la policía necesita su espacio para trabajar, pero que pueda haber protocolos, reglas claras de cómo se va a trabajar, consensuadas entre autoridades y el gremio periodístico para que no dejemos esto a la discrecionalidad o al criterio de agentes policiacos que muchas veces se exceden en sus funciones y todo esto va en detrimento de nosotros como periodistas”, concluyó.
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