El temblor tuvo una magnitud de 5,9 en la escala Richter y su epicentro se ubicó a 35 kilómetros de la ciudad de Bolonia.
Miles de personas que han perdido su casa deberán alojarse en refugios provisionales mientras las réplicas expanden el temor en la región.
Por lo menos tres de las víctimas murieron por el colapso de edificios, mientras que los equipos de emergencia informan de decenas de heridos como consecuencia de la caída de otras estructuras.
Ayuntamiento de San Agostino.
La agencia italiana de noticias ANSA cita a portavoces de los servicios de emergencia quienes informan que dos de las personas fallecieron cuando se derrumbó una fábrica de cerámicas en San Agostino de Ferrara, mientras que otra muerte se registró en Ponte Rodoni do Bondeno.
Además una mujer de 37 años murió en San Alberto de San Pedro en Casale, en Bolonia, probablemente a causa de una crisis provocada por el miedo durante el terremoto, según informó el Comando Provincial de los Carbineros de Bolonia.
Sin embargo, la causa de la muerte no pudo ser establecida aún.
Las primeras imágenes mostradas por la televisión italiana muestran varios antiguos edificios dañados.
Miles de personas salieron a las calles tras el temblor en ciudades como Bolonia, Módena, Ferrara, Rovigo, Verona y Mantua.
El último terremoto de gran magnitud en azotar Italia se produjo en 2009 en la región de L’Aquila y dejó cerca de 300 muertos.
En enero pasado otro sismo, de magnitud 5,3, se sintió en el norte del país en la región de Génova, Turín y Milán.
Con información de la BBC