Doce horas de viaje valieron la pena, ¡por fin están de vuelta en casa! El Ballet Folklórico de la Universidad de Colima, dirigido por el maestro Rafael Zamarripa, regresó a Colima la madrugada de este viernes después de haber realizado una gira de un mes en España, donde participó en tres festivales internacionales: Burgos, Portugalete y Viveiro.
Los 42 integrantes de la agrupación –entre bailarines, cantantes, músicos y directivos que realizaron esta gira— fueron ovacionados en todas sus presentaciones: recibían aplausos tan prolongados que parecía que iban a alcanzar la eternidad.
“Nos fue maravillosamente bien” resumió Rafael Zamarripa, quien regresó a Colima antes que el resto de la agrupación para incorporarse oportunamente a sus actividades laborales. En la memoria del maestro quedarán grabados algunos de los momentos más importantes de esta gira: cuando, por ejemplo, actuaron en la explanada de la Catedral de Burgos al tiempo que se proyectaba –sobre la mismísima catedral– una producción audiovisual que narraba la historia de la conquista de América. La danza, la música, la emoción, se fusionaron en esa noche emotiva.
Y es que ahí, en esa primera presentación que tuvo lugar en Burgos, provincia ubicada al norte de la Península Ibérica, el Ballet Folklórico de la Universidad de Colima se unió a los festejos por el quinientos aniversario de las leyes de Burgos que, a su vez, constituyeron las bases de lo que hoy conocemos como derechos humanos.
Los integrantes de la agrupación que, para algunos de los números, requerían un vestuario ligero, sufrieron con los climas extremos: en Burgos se sentía un calor sofocante por las tardes y un frío intenso por la noche: “Fue necesario que algunos compraran ropa térmica color piel para poder salir a escena”, apuntó el maestro Zamarripa, en entrevista.
Las funciones del BFUC en España –que incluyeron presentaciones por varias provincias de España y del País Vasco—fueron presenciadas por miles de españoles y, además, por funcionarios de alto rango: el embajador de México e integrantes del consorcio internacional de folklor, por ejemplo. Los directores de algunos festivales se acercaron al maestro Rafael Zamarripa para invitarlo a participar, junto con el BFUC, en festivales posteriores. El maestro tiene algunos meses para pensar su respuesta. {jathumbnail off}