El Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, y el Subsecretario General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y Director Ejecutivo de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés), Antonio María Costa, presentaron la Campaña “Corazón Azul”, un movimiento global que busca crear conciencia sobre el delito de trata de personas y su impacto en la sociedad.
En julio de 2009, coincidiendo con la instalación de la Comisión Intersecretarial para Prevenir y Sancionar la Trata de Personas, sus integrantes aprobaron por unanimidad la propuesta de la UNODC para que México fuera sede del lanzamiento de la Campaña “Corazón Azul”, en América Latina.
De esta manera, México se convirtió en el primer país del mundo en adoptar oficialmente esta Campaña, al mismo tiempo que se estableció una fructífera alianza con la UNODC para sensibilizar a la sociedad mexicana sobre el delito de trata de personas.
El objetivo principal de la Campaña “Corazón Azul” es despertar conciencia entre la población, así como movilizar a los gobiernos, la sociedad civil, el sector privado y, en última instancia, a cada persona en la lucha contra la trata de personas.
Asimismo, se pone en marcha un proceso fundamental para informar a la ciudadanía sobre las características, modalidades e impacto de este delito, con el fin último de construir una cultura ciudadana de la denuncia.
Durante su intervención, el Presidente Felipe Calderón afirmó que ante este problema de trata de personas se requiere que todos los que conforman el Estado sumen esfuerzos, porque “las personas que son traficadas como objetos están exigiendo, reclamando, y con todo derecho, nuestra ayuda, nuestro valor; no nuestra cobardía, no nuestra negligencia, no nuestro temor”.