Sudáfrica logró un «sensacional» incremento en la expectativa de vida en los últimos tres años debido a un impulso del Gobierno a la ampliación del acceso a los medicamentos antirretrovirales (ARV) para las personas con VIH/sida, dijeron el jueves expertos.
El promedio de vida de un sudafricano es actualmente hasta los 60 años, indicó un estudio publicado en la revista médica The Lancet, comparado con apenas 56.5 años en el 2009, cuando el presidente Jacob Zuma llegó al poder con la promesa de un nuevo enfoque sobre el VIH/sida para el país duramente afectado por la condición.
La principal economía de Africa alberga a 6 millones de personas con VIH/sida, pero bajo el mandato del antecesor de Zuma, Thabo Mbeki, el Gobierno era reticente a brindar los fármacos fundamentales para salvar la vida de esos pacientes, indicó la investigación.
Casi 2 millones de personas están recibiendo actualmente la dosis diaria de ARV en lo que es el programa más amplio de esa medicación en el mundo. El total se compara con 912 mil personas en tratamiento en el país en el 2009 y apenas 235 mil tres años antes.
Aunque las tasas generales de infección se han mantenido constantes alrededor del 10 por ciento desde el 2006, los autores del estudio dijeron que un aumento tan importante en la expectativa de vida era inédito.
«Hay muchos factores que contribuyen a la expectativa de vida, pero el más importante individualmente fue la expansión del programa de tratamiento ARV», dijo el profesor Salim Abdool Karim, director del Centro para el Programa de Investigación del Sida en Sudáfrica, y miembro del equipo investigador.
«Ese incremento es sensacional. Uno no suele ver este tipo de aumentos en el mundo real», agregó.
Con todo, Sudáfrica aún enfrenta muchos desafíos, particularmente en la reducción de la enorme carga de disparidad racial en el acceso a los servicios de salud.
Apenas el 10.3 por ciento de la población negra sudafricana, que representa el 80 por ciento del total de los habitantes del país, tiene cobertura médica, comparado con el 70.9 por ciento de los blancos, que son apenas el 10 por ciento de los 52 millones de personas que conforman el país, mostró el estudio.
Con información de Reuters
{jathumbnail off}
