Colima.- El Congreso del Estado de Colima dio carpetazo a los supuestos actos de corrupción en el Órgano Superior de Auditoría y Fiscalización Gubernamental (Osafig), a pesar de que la Comisión de Vigilancia encontró irregularidades en la adquisición de un vehículo que habría sido usado para apoyar la campaña política del PRI en 2012.
El presidente de la Comisión de Gobierno Interno, Martín Flores Castañeda, precisó que los coordinadores de todas las fracciones parlamentarias del Legislativo local aprobaron por unanimidad la renuncia de la auditora superior del estado, María Cristina González Márquez, con lo que quedó sin efecto el dictamen que pedía su remoción.
“Dejaron sin efecto la solicitud para iniciar un proceso, aceptamos la renuncia y no entramos al fondo del asunto”.
El priista precisó que el Congreso no acredita responsabilidad alguna a la servidora pública, al contrario, reconoce el desarrollo institucional y su salida digna.
Los partidos de oposición, pese a aceptar la renuncia en la Comisión de Gobierno Interno, exigían que se actuara administrativa y penalmente contra la ex auditora, y que se investigara al actual secretario de Desarrollo Social, Rigoberto Salazar Velasco.
El automóvil que habría sido usado para la campaña priista se puso a nombre de Alejandro Salazar Orozco, quien laboraba en el Osafig y es sobrino de Salazar Velasco cuando era diputado local.
Entrevistado por separado, el titular de la Secretaría de Desarrollo Social evitó hablar del tema, argumentando que ya terminó sus funciones como legislador.
“Yo soy muy respetuoso de la autonomía del Osafig y de lo que decide el Congreso”.
Al ser cuestionado sobre si debería ser investigado sobre este hecho, respondió “que lo determine el Congreso”.
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