Colima.- Los retrasos en los pagos a los trabajadores del Gobierno del Estado, y los posibles despidos en este sector, preocupan al sector empresarial, pues dejan ver graves problemas financieros que pueden afectar la economía local, consideró el presidente del Centro Empresarial de Colima, Guillermo Brun Solórzano.
“Nos preocupa mucho a Coparmex este tema, porque apenas empezamos a ver la problemática. Creemos que será un problema que se va a ir turnando en los siguientes meses cada vez más complicado, porque es masivo”.
En entrevista con AFmedios, el dirigente empresarial refirió que aún no es muy notorio el efecto en la economía de los retrasos en los pagos quincenales a los trabajadores; sin embargo, apuntó que el problema radica en lo que dejan ver estos retrasos; es decir, la falta de liquidez del gobierno estatal, lo que se suma a las dificultades económicas de los ayuntamientos.
“Tal vez, como en ninguna ocasión, se ha juntado que los municipios tienen un problema de liquidez (…). Tradicionalmente, a fines de año han volteado al Gobierno del Estado para que los apoye con los pagos de aguinaldo y los últimos compromisos del año; en esta ocasión lo van a hacer, y el gobierno del estado no va a tener dinero”.
Brun Solórzano explicó que anteriormente, el gobierno estatal contaba con recursos del fondo del petróleo, los cuales le permitían subsanar solicitudes de este tipo, y que ahora que no podrá disponer de estos recursos no presupuestados, tampoco puede recurrir al gobierno federal, ya que este se halla en condiciones económicas similares.
Con respecto a las medidas para restringir el gasto y suprimir plazas en la administración pública estatal, Brun Solórzano refirió que podrán solucionar el problema de liquidez del gobierno estatal, pero que lo pasarían a las familias que estaban acostumbradas al ingreso derivado de esas plazas, y en el largo plazo afectarán la economía del estado, porque habrá menos dinero en circulación.
“Es muy importante que el gobernador, los presidentes municipales y las comisiones que tienen que ver con el uso de presupuestos y recursos informen a la ciudadanía de cuál es la situación actual y qué se va a hacer para corregirlo, porque un tema como este no se resuelve de un día para otro”.
Brun Solórzano recordó que el sector empresarial y los candidatos que contendieron en la elección del 7 de junio acordaron reducir los gastos de operación incluidas las nóminas, en los gobiernos estatal y municipales, de tal forma que al final del próximo trienio y sexenio la reducción de estos gastos llegara a entre 30 y 35 por ciento del presupuesto.
Así, agregó, con la reducción de puestos de trabajo cuyos contratos ya no se renovaran, más un apoyo a la economía, las empresas comenzarían a generar nuevos empleos y se daría una migración paulatina, suave, que no generara un problema financiero para el estado.
“Sin embargo, cuando se habla de despidos masivos de un día para otro, es imposible que la iniciativa privada los absorba (a los trabajadores) de un día para otro, y más cuando muchas empresas están frenando su crecimiento porque no tienen el recurso porque no les ha pagado el gobierno del estado”.
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