MANZANILLO.- La gobernadora de Colima, Indira Vizcaíno Silva, dio a conocer que estamos a unos días de que se reanuden las obras de ampliación de dos a cuatro carriles en la carretera transvolcánica Colima-Guadalajara, que estarían concluidas en un periodo de 6 a 8 meses, para finalizar esta vía tan necesaria para la región, lo anterior lo dio a conocer durante los “Diálogos por la Transformación” que encabezó este viernes desde la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona), en Manzanillo.
Dijo que es una obra muy importante para la entidad, por la relevancia para el comercio y el transporte, para miles de colimenses que se trasladan al vecino estado de Jalisco y viceversa.
“Si tenemos al puerto más importante del país -Manzanillo-, merecemos tener también las mejores carreteras del país, para que pase la carga que llega y sale del puerto, pues representa muchísimo económicamente para la región -Occidente- y para México, pero esto no tiene por qué poner en riesgo a nadie”, aseveró la titular del Poder Ejecutivo en el estado de Colima.
En su intervención, la secretaria de Infraestructura, Desarrollo Urbano y Movilidad (Seidum), Marisol Neri León, agregó que el 29 de abril celebraron una reunión funcionarias y funcionarios del Gobierno de Colima, Gobierno de México y representantes del Ejido San Marcos (municipio de Tonila, Jalisco), para dar seguimiento a los acuerdos para la conclusión de la carretera transvolcánica.
“Ya se cuenta con todas las condiciones jurídicas para reactivar la obra y los trabajos iniciarán a mediados de este mes; entre 6 y 8 meses quedará totalmente concluido y habilitado este tramo carretero (kilómetro 103.5 al 120)”, precisó la funcionaria, quien presentó una línea del tiempo de cómo se avanzó en la resolución del conflicto que alguna vez existió con el Ejido San Marcos y añadió que esta situación inició en junio de 2019, con un juicio de amparo contra la entonces Secretaría de Comunicaciones y Transportes, con el que se concedió la suspensión de la obra en tanto se resolvía el recurso legal.
En la actual gestión de la gobernadora Indira Vizcaíno Silva se reanudaron los diálogos con el ejido, se tuvo el acompañamiento del gobierno federal, “y logramos destrabar el tema para dar continuidad a esta obra, que beneficiará a las personas que viajan entre ambas entidades y lo hagan de manera segura y menor tiempo”, añadió.
Sobre los trabajos pendientes, la titular de Seidum dijo que se acordó con las y los ejidatarios realizar obras complementarias compensatorias, que ambos gobiernos consideraron justas para que sus parcelas no fueran afectadas por esta carretera; la mayoría son obras para permitir el acceso seguro a sus parcelas, caminos, bordos de material y bastantes obras hidráulicas.
Agregó que toda vez que están todas las condiciones jurídicas y fueron avalados los desistimientos por autoridades ejidales, ya fueron procesados en los juzgados correspondientes, fueron notificados oficialmente todas y todos los involucrados, entre ellos, el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), que es el concesionario de esta autopista.
“Así pues, ya se está por arrancar con los trabajos de conclusión de esta ampliación de dos a cuatro carriles, en un total de 16.5 kilómetros; los trabajos están muy avanzados (93.9%), aun así, es una obra que tiene su complejidad; confiamos que el Gobierno de México, a través de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y Banobras, podrán concluir el compromiso de que la vialidad esté funcionando antes de que concluya este año”, enfatizó Neri León.