El presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, indicó que el despliegue mostrado para el registro de Luisa María Calderón como candidata del PAN a la gubernatura de Michoacán anticipa que el blanquiazul le va a echar “toda la carne al asador” a esa elección.
Entrevistado en el marco del 13 Congreso Nacional Extraordinario del PRD, expuso que Michoacán ya se tornó en un escenario nacional, por lo que “vamos a estar ahí apoyando a nuestros compañeros para terminar bien el 2011 y entrar con renovados ánimos al 2012”.
Luisa María Calderón fue registrada como candidata del PAN a la gubernatura de Michoacán, acto al que asistieron el dirigente nacional del blanquiazul, los líderes del partido en ambas cámaras legislativas, siete gobernadores y dos secretarios de Estado.
Recordó que pese al llamado “michoacanazo”, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) ganó en la pasada elección ocho de los 12 distritos federales, y “ahora con un candidato como Silvano (Aureoles) y un PRI que también quiere terminar con el 2012 con un triunfo en Michoacán, les vamos a ganar”.
Aclaró que su partido estará muy pendiente de lo que hagan el PRI y el PAN, pues “Humberto Moreira se quiere cambiar a Michoacán para llevarse parte de los recursos de la deuda millonaria y fraudulenta que contrajo cuando fue gobernador en Coahuila, pero estaremos pendientes”.
Por otro lado, Zambrano reconoció que el crimen organizado puede ser un factor que distorsione de alguna manera el proceso electoral michoacano.
“Estamos haciendo todos los esfuerzos para que como partido, en concordancia con las autoridades electorales y de seguridad del estado y la federación, posibilitemos el realizar elecciones en los 113 municipios de Michoacán y que esto se desarrolle con seguridad”, explicó.
Mencionó que ante el riesgo de lo que significa el crimen organizado en Michoacán “las campañas electorales y las propias elecciones del 13 de noviembre deben verse como una oportunidad para recuperar los espacios públicos que pudiera tener el narcotráfico”.
Sobre el caso de Gregorio Sánchez opinó que fue un “montaje para desbarrancarlo de la contienda electoral, pues de otra forma él muy probablemente sería el gobernador de Quintana Roo y no lo es porque usaron al Ministerio Público con fines políticos”.
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