En el marco del Seminario Elecciones y Democracia 2021 realizado por la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Colima y el Instituto Electoral del Estado de Colima (IEE), se realizó el pasado fin de semana la quinta y última mesa de trabajo titulada “El rol de las autoridades electorales”, con la participación de consejeros y funcionarios del IEE y del Instituto Nacional Electoral (INE).
En un primer momento, la consejera Electoral del Consejo General del IEE, Arlen Alejandra Martínez Fuentes destacó al proceso electoral como “un mecanismo fundamental para expresar la voluntad de la ciudadanía mediante el sufragio, el cual a su vez se define como la única fuente legítima para crear representación y gobierno”.
Agregó que, en nuestro país, la autoridad encargada de las elecciones federales es el Instituto Nacional Electoral y que cada entidad federativa cuenta con su propio organismo público autónomo encargado de organizar las elecciones locales. La creación de institutos electorales autónomos “fue importante para los estados, ya que dichos organismos sirvieron no sólo de administradores del conflicto político electoral local, toda vez que, además de su profesionalización y autonomía, lograron cobijar y sostener la alternancia política en varios estados de la república”.
Por último, comentó que “el rol de las autoridades electorales es trascendente para los procesos electivos, porque es ahí donde se ven reflejadas las actividades que de manera permanente se realizan en aras de alcanzar los fines y preservar, fortalecer, promover y fomentar el desarrollo de la democracia en nuestra entidad”.
En su intervención, la universitaria y consejera electoral del Consejo Local del INE, Guillermina Araiza Torres, habló sobre la importancia de la participación ciudadana en los organismos electorales y aseguró que dicha ciudadanización inicia en el máximo órgano de dirección, que es el Consejo General del INE, y en los 32 consejos locales y 300 distritos electorales en los que también la ciudadanía está presente.
Añadió que las consejeras y consejeros electorales son responsables de vigilar constante y permanentemente que las autoridades administrativas se apeguen al proceso, por lo que no hay cabida, afirmó, “para que ningún actor político descalifique el trabajo y la prerrogativa ciudadana. Éste es solo el inicio de la cadena de ciudadanización, ya que se encuentra también la figura de los capacitadores, asistentes y supervisores electorales presentes en este ejercicio”.
Destacó, por último, la importancia que tienen las funcionarias y funcionarios de casilla, que son ciudadanos y vecinos quienes el día de la jornada electoral atenderán las aproximadamente 977 casillas que se instalarán en el estado de Colima y que requieren la participación de 8 mil 793 personas; “Es importante señalar -finalizó- que la última y más importante autoridad electoral el día de la jornada electoral son los propios ciudadanos”.
En su intervención, el secretario ejecutivo del Consejo General del IEE, Óscar Omar Espinoza destacó la importancia del seminario realizado en nuestra casa de estudios, ya que se trata de una iniciativa cuyos objetivos, enfatizó, “son dignos de elogio por la superación de todos los obstáculos que se presentaron para concretar el evento, sobre todo por las restricciones que se presentaron debido a la pandemia de COVID-19”.
“El mérito -agregó- radica en concertar esfuerzos de todo tipo, humanos, materiales y logísticos para hacer llegar las herramientas a sus destinatarios finales: candidatas y candidatos, dirigencias y áreas jurídicas de los partidos políticos, autoridades electorales, personal académico especializado y, lo que es mejor, la propia ciudadanía, a efecto de fomentar una decisión más informada en el marco del proceso electoral local 2020 – 2021”.
Finalmente comentó que, durante sus 30 años de vida, el IEE tiene documentadas una serie de buenas prácticas o casos de éxito que permiten afirmar que el estado cuenta con un organismo electoral profesional y especializado en la organización de las elecciones, “ya que, gracias a su estricto apego a los principios rectores de la función electoral, ha permitido que la transición de gobiernos se lleve a cabo de una forma pacífica, periódica y con elecciones libres, características de un régimen democrático como el que existe en nuestro país”.
En su intervención, el secretario del Consejo Local del INE, José Salvador Contreras González señaló que uno de los aspectos fundamentales en una vida democrática saludable es el de los buenos procesos electorales y en el caso de nuestro país, dijo, “en el cual existe una democracia procedimental, el guardián y custodio de este tipo de procesos es el Instituto Nacional Electoral (INE). Según la Organización de Estados Americanos (2008), hay elecciones democráticas cuando se cumplen cuatro condiciones básicas: ser inclusivas, limpias y competitivas, y que los cargos públicos sean obtenidos mediante elecciones periódicas”.
El funcionario aclaró que no basta con que el voto se extienda al mayor número de personas, sino que también es importante que valga lo mismo frente a los demás; es decir, se debe cumplir el principio de una persona–un voto, de tal manera que el voto de la persona más adinerada valga lo mismo que el de la persona con menos recursos en México; “para estas dos tareas, hay que asegurar que sólo emitan en secreto su sufragio quienes están en facultades para ello y velar porque nadie pueda votar más de una vez”.
Finalmente, informó que de una población de 126 millones 14 mil 24 habitantes en el país contados por el INEGI, en el INE, con corte al 28 de febrero de este año, se tienen registradas en la lista nominal de electoras a 93 millones 291 mil 50 ciudadanas y ciudadanos, cifra que se incrementará aún más, ya que será hasta el 10 de abril de este año cuando se tenga la lista nominal definitiva que se utilizará en los comicios del 6 de junio del presente año, ello en función de que tal fecha es el límite para que aquellas personas que solicitaron su credencial acudan a recogerla”.