Dani Aranzubia, portero del Deportivo de La Coruña, ha reconocido que la situación que ha vivido en las últimas horas tras su gol ante el Almería, el primero que marca un guardameta de cabeza en la Liga española, «es anecdótico y no volverá a pasar».
«Esto es anecdótico. Pasó el otro día y no volverá a pasar», explicó el cancerbero en su comparecencia ante los medios de comunicación tras el entrenamiento en la ciudad deportiva de Abegondo.
Aranzubia recordó que no era «la primera vez» que se sumaba al ataque en las últimas acciones de un partido en el que su equipo va por detrás en el marcador.
«Aquí, en el Deportivo, ya subí (al ataque) en Riazor. Pierdes, ves que hay un córner y no voy a ser el primero ni el último en hacerlo. Si alguna vez vuelve a darse una situación como esta también lo haré», comentó.
Aseguró que en el futuro irá «con la misma fe» con la que fue al área del Almería, aunque no esperaba contactar con el balón.
«Cuando subes no vas con la intención de rematar, pero si llega el balón lo rematas, como fue el caso del otro día», dijo.
El portero recordó que estuvo a punto de encajar recientemente un gol de otro portero, Gorka Iraizoz, del Athletic de Bilbao, pero el balón «le pegó a Manuel Pablo» y no entró en la meta.
También se acordó del gol que le anularon por falta a otro portero del Deportivo, el camerunés Jacques Songo’o, ante el Numancia en la temporada 1999-00, también de cabeza y en una acción a balón parado.
«Recordaba que no había falta, pero viéndola otra vez parece mentira que se pitase algo en aquella jugada», explicó Aranzubia.
Hasta que vio las imágenes de televisión, el guardameta del Deportivo apenas recordaba que había pasado entre su cabezazo y la celebración.
«En ese momento no se me pasó nada por la cabeza. Absolutamente nada. Tengo la imagen del remate, pero hasta que no vi las imágenes no sabía lo que había pasado en la celebración. Fue un momento bonito», manifestó.
Aranzubia reconoció que «en las imágenes se ve» que el guardameta del Almería, el brasileño Diego Alves, «no sale bien», pero le justificó porque «un portero en el área contraria genera incertidumbre y confusión».
«Te puedes aprovechar de eso», agregó el cancerbero deportivista, que confesó que ha pasado dos días «extraños» por la repercusión que tuvo su gol.
«A pesar de que uno está acostumbrado a salir en el periódico y a verse en la televisión, no había tenido tanta repercusión», apuntó.
No obstante, el portero del Deportivo pasa página a lo sucedido y ya se centra en el siguiente compromiso del equipo, el sábado ante el Real Madrid en el estadio de Riazor.
«A partir de hoy será una semana normal, tenemos un partido importantísimo el sábado y esto queda ya en segundo plano», sentenció. EFE
