Colima.- El presidente de la organización de restauranteros de la zona de Tolerancia de Colima, Miguel Lombera Barragán, denunció que no se ha hecho nada para erradicar la prostitución irregular en la vía pública y que en determinado tiempo empezarán a ‘brotar’ enfermedades infecto-contagiosas.
En junio de 2011 ya habían denunciado la situación, lo que según Lombera Barragán, provocó que el Ayuntamiento de Colima actuará de manera represiva contra quienes trabajan en la ‘zona roja’, ya que durante una noche mandaron a alrededor de 20 inspectores quienes hostigaron, levantaron actas de manera injustificada y amenazaron con cerrar negocios.
“Desde ese día nos ha ido de la patada, ha habido represión por parte de las autoridades; en los 18 años que dirijo la zona de tolerancia no habíamos tenido un acto represivo (…) 20 inspectores durante la noche, nos hostigaron y levantaron actas de manera injustificadas”.
Aseguró que por esos motivos hay ciertas demandas en lo Contencioso Administrativo.
A decir de Lombera Barragán, la zona de tolerancia se está quedando sola, porque muchos sexoservidores y sexoservidoras se van a las calles a prostituirse ya que no pasan registros ni pagan análisis clínicos.
Denunció que la Comisión Estatal Contra los Riesgos Sanitarios (COESPRIS) y Secretaría de Salud, no tienen control en analizar a las personas que se prostituyen en las calles.
“Seria sano que se hiciera en todos los lugares y en la zona pública donde no hicieron el intento de controlar la prostitución clandestina”.
El presidente de la organización de restauranteros de la zona de Tolerancia aseguró que además ha detectado prostitución de adolescentes y trabaja con la Dirección de Desarrollo Humano del Gobierno Estatal, para ver mecanismos de cómo ayudar a los jóvenes tanto moral como psicológicamente.
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