El gobierno de Chiapas decidió cambiar de penal al ex gobernador Pablo Salazar Mendiguchía para resguardar su integridad, pues un grupo de internos planeaba atentar contra él por haberlos encerrado en ese centro penitenciario.
Salazar Mendiguchía, quien desde el pasado 7 de junio fue recluido al Centro Estatal de Reinserción Social de Sentenciados (CERSS) número 14, «El Amate», acusado de desviar recursos del erario por 104 millones de pesos, así como del homicidio doloso de recién nacidos en el hospital de Comitán en diciembre de 2001 y enero de 2003, fue trasladado con carácter de urgente al CERSS número siete de Huixtla, ubicado en la región Costa y a unos 35 kilómetros de esta ciudad.
En ese centro penitenciario también se encuentra preso desde junio quien fuera su fiscal general, Mariano Herrán Salvatti, pero actualmente convalece en un hospital de Tuxtla Gutiérrez.
En un comunicado, el gobierno chiapaneco informó que debido a diversos anónimos recibidos por parte de algunos reos del penal «El Amate», donde se alertaba del peligro que corría Salazar Mendiguchía al permanecer en ese centro penitenciario, el Consejo Técnico Consultivo del CERSS número 14 acordó por unanimidad el traslado necesario con carácter urgente del ex mandatario.
Abunda que uno de los anónimos enviado por un grupo de mujeres internas al director del penal, daba cuenta que algunas de sus compañeras buscaban pasar información a los hombres con la finalidad de avisar de los momentos en que Salazar Mendiguchía era llevado al servicio médico o al área de juzgados.
De igual forma, en otro escrito enviado por reclusos del área varonil se alertaba que un grupo de internos pretendía causarle daño a Salazar Mendiguchía; esperaban un descuido de la seguridad para agredirlo, ya que le tienen odio y rencor porque durante su gobierno los encerraron en ese penal.
Por estos hechos el ex gobernador fue ingresado el pasado martes al CERSS número siete de Huixtla, donde ya pasó su primera noche.
Con información del Universal
