El arrestado, Andrés Felipe Ríos Giraldo, que supuestamente pertenecería a la Red Urbana Antonio Nariño (RUAN), de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), fue presentado a órdenes de un juez que le definirá su situación en las próximas horas, coincidieron medios locales.
En la vivienda del barrio El Paraíso de la capital colombiana, en donde se produjo la captura, la Policía halló 10 estopines que sirven para activar cargas explosivas y material alusivo a las FARC.
Esta es la primera captura que realizan la autoridades que investigan su presunta participación en la acción terrorista del pasado 15 de mayo ocurrida a pocas cuadras del centro financiero de Bogotá, en donde además funcionan universidades, colegios y centros comerciales frecuentados por numerosas personas.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, ha dicho en varias oportunidades que no se tiene certeza de quiénes fueron los autores del atentado. En contraposición, Londoño reiteró hoy, en una rueda de prensa en su casa, que los autores materiales del atentado con una bomba lapa, fueron rebeldes de las FARC.
Londoño, quien fue ministro del Interior y de Justicia entre 2002 y 2004 en la administración del ahora expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), también le exigió a Santos ejercer el liderazgo que se espera de él contra el terrorismo y dijo que si no lo consigue «habría que encontrar otro».
«Se necesita a alguien con liderazgo y no estoy proponiendo un golpe de Estado. El líder obvio es el presidente, pero cuando el presidente falla, surgen otros líderes que son seguidos por el pueblo. Ese liderazgo tiene que aparecer o estamos perdidos», sostuvo Londoño en una rueda de prensa en su casa.
El ex ministro también dijo que con el atentado en su contra se pretendía silenciar a la prensa «por el medio más directo y más eficaz: el terror en el corazón de los periodistas que preferirán el silencio acomodado, la observación pausada de aquellos fenómenos y la inacción a tomar el riesgo de una bomba lapa».
Londoño señaló, además, que el medio utilizado para intentar acabar con su vida «representa una finura» en el «manejo de la capacidad de agresión que tenemos que observar muy de cerca».
Londoño, quien desde el lunes se recupera en su residencia de las heridas que le causó el 15 de mayo una bomba adherida a su vehículo, y en el que murieron su conductor y un escolta, llamó a Santos a convocar a la «unidad nacional» y a los miembros de las fuerzas de seguridad para combatir con efectividad el terrorismo.
«Santos tiene que reconocer que esto se le salió de las manos», remarcó Londoño, quien agregó que si «no fuera capaz para hacer esa convocatoria en contra del terrorismo (…) habría que encontrar otro» líder.
El abogado y economista hizo esta apreciación al recordar que eso sucedió en 2002, cuando Colombia era un Estado fallido y apareció un «hombre proverbial»: el expresidente Álvaro Uribe, del que fue ministro.
Además, el exministro que estuvo frente a esa cartera entre 2002 y 2004 defendió su tesis sobre la responsabilidad de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) tras su atentado y reprochó a Santos «que haya sido la única persona del gobierno» que se haya referido a la posibilidad de que un grupo de otra tendencia pueda estar detrás del ataque.
Enfatizó en que «es torpe decir si esta forma de terror es de derecha o izquierda. Son terroristas que deben ser derrotados y vencidos». El exministro expuso que desde su gestión en el ministerio ha recibido amenazas de las FARC que luego fueron halladas en computadores de guerrilleros encontrados en operativos militares y policiales, y reveló que hace un año hubo un plan para secuestrarlo en coincidencia con la fiesta nacional de Colombia el 20 de julio.
Londoño afirmó entonces que tiene la «íntima y absoluta convicción de que fueron las FARC», renovadas tecnológicamente y activas en Bogotá, las que atentaron en su contra. Por eso, retó al presidente Santos a explicarle en una entrevista en su programa «La hora de la verdad» de la red de emisoras Radio Súper para que diga abiertamente quiénes pertenecen a la extrema derecha y quiénes son «esos tiburones que han aparecido en el mapa oceanográfico de Colombia».
De otro lado, Londoño llamó a la unión del país para enfrentar el terror y señaló que el atentado del martes de la semana anterior contra su vida, es una notificación a la prensa y a la sociedad para que supieran que «en Colombia hay cosas que no se pueden decir».
«Frente al terror tenemos que estar unidos, frente al terror tenemos que ser no solamente solidarios, sino mucho más que eso, porque nos estamos jugando, literalmente, la vida», señaló el político del Partido Conservador. Afirmó que frente al terror «no caben dudas, distingos, ni caben relativismos» y agregó que «el terror es un hecho absoluto que nos compromete a todos por igual».
Con información de EFE