El matador, Diego Silveti, fue el triunfador de la primer Corrida de Gala Charrotaurina celebrada en la plaza de toros La Petatera, al cortar dos orejas al segundo toro de su lote, último de la gran tarde que se vivió en el coso villalvarense mismo que sirvió de marco para institucionalizar la gala charrotaurina, en la que matadores, subalternos y mozos vistieron de charros.
Con templanza y la elegancia que caracteriza a la dinastía de los Silveti, Diego cuajó sendos derechazos y algunos naturales, al segundo de su lote, Zarzo, un colorado de 500 kilogramos, bien puesto de pitones, que al igual que sus hermanos de la ganadería de Montecristo llegaron transmisión pero poca fuerza.
Después de cerrar con manoletinas, mirando al tenido de sombra, el joven mexicano, se tiró a matar, pegando media estocada en buen sitio y a su vez mortal, que le valieron las dos orejas que otorgó el juez ante la presión del respetable.
Vestido de charro en azul y plata, Octavio García “el payo”, cortó una oreja al primero de su lote, tercero de la lidia, de nombre Galante, un negro bragado, listón, que alegre fue al capote y con quien se pudo lucir “el payo”.
Con la muleta marcó derechazos lentos y lucidores, así como algunos naturales que arrancaron “el ole” de los aficionados, quienes le otorgaron la primer oreja de la tarde, pese a que pinchó al entrar a matar.
Alejandro Amaya no tuvo mucha suerte al entrar a matar y con los dos toros de su lote pinchó en todo lo alto y fue pitado por la autoridad al acudir al descabelle, pese a que los dos de Montecristo –charro de 490 kilogramos y Calador de 470 kilogramos- no fueron toros malos, pues a ambos astados les sacó vistosos derechazos y naturales con la muleta.
Cabe resaltar que uno de los momentos más lucidores, fue el segundo tercio, del primero de lote de Amaya, al que le clavaron pares de banderillas en todo lo alto, entre Amaya y “el payo.”
La tarde en la monumental Petatera de Villa de Álvarez la abrió el rejoneador, Jorge Hernández Garate, quien vestido de charro, lució en el segundo tercio de la lidia, al clavar de manera espectacular 5 banderillas largas y una corta, que le valió el reconocimiento de los aficionados que le gritaron “ole” al torear a la grupa a Villalvarense de 490 kilogramos, sin embargo, a la momento de matar, pincho y tuvo que acudir al descabelle.
La música de mariachi engalanó la tarde, tocando hermosos pasos dobles, mientras los toreros se entregaron en cada lote, en cada tercio.
Sin duda la empresa Casa Toreros organizó una gran corrida de gala charroturina, misma que abrió una escaramuza, bajo los acordes de la música de mariachi.
Además de empresarios y ganaderos, desde el palco, el alcalde, Kike Rojas, acompañado por la presidenta del DIF Verónica Quintero Guerrero y el Administrador del Patronato, siguieron las incidencias de la primer gran corrida de gala charrotaurina. BP