El problema no es la postura, tampoco el atuendo y mucho menos los colores; simplemente, se trata de que Dakota Fanning es menor de edad y la manera en que colocó una fragancia entre sus piernas fue suficiente para que la censuraran en Inglaterra.
La British Advertising Standards Authority (Oficina de regulación de la publicidad británica), aparentemente con el apoyo del Primer Ministro, prohibió el anuncio para el que Dakota posó; se trata del perfume “Oh Lola”, de Marc Jacobs.
El organismo argumenta que buscan prevenir el inicio de la vida sexual de los niños, según el portal Daily News.
“La modelo sostenía el perfume entre sus piernas y consideramos que su posición era sexualmente provocativa. Entendemos que la modelo tiene 17 años de edad, pero aparenta menos de 16.
“Creemos que el largo de su vestuario, su pierna y la posición de la botella tienen una connotación sexual. Por eso, además de su apariencia, consideramos que el anuncio puede verse como un elemento sexualizante de un niño”, explicaron representantes de la oficina en un comunicado.
En tanto, Jacobs indicó que la publicidad se realizó con total conocimiento de la protagonista de “The Runaways”.
“Dakota estaba de acuerdo, y yo sabía que ella podría ser una Lolita contemporánea, seductora, pero dulce», mencionó.
Irritan a los ingleses
La adolescente de 17 años de edad es el tercer caso de una celebridad censurada en menos de dos meses en Inglaterra; Rihanna irritó a una comunidad por no vestir “apropiadamente” durante la filmación de su video “We found love”, en una granja.
Un spot de Bono, George Clooney, Annie Lennox y Colin Farrell fue considerado “incorrectamente político”.
En el anuncio de una campaña para la organización “One” fue lanzado para tomar conciencia sobre la hambruna en Africa y que le ha costado la vida a 30 mil niños en los últimos meses.
Los actores realizan un juego de palabras con “Famine” (hambruna” que refiere al insulto en inglés “fuck”.
Una historia parecida pueden contar Beyoncé, con su perfume, y Katy Perry con sus senos. El comercial de la fragancia Heat fue considerado “erótico y sexual”, mientras que la californiana provocó a los puritanos con sus encantos en el videoclip “Firework”.