El trabajo que realizan estos comités sea fortalecido a través de la capacitación y equipamiento necesario para la ejecución de sus funciones; adicionalmente el personal de la CONANP los apoya en la implementación de las acciones y sistematización de la información.
En los esfuerzos de conservación y monitoreo, han participado diversas instituciones gubernamentales, académicas y de investigación, así como asociaciones civiles. Gracias a estos esfuerzos, a la fecha se tienen identificados 284 nidos con aproximadamente 102 parejas de águila real.
A través del Programa de Acción para la Conservación de la Especies (PACE) se ha logrado sumar voluntades y esfuerzos entorno a la conservación del águila real, lo cual sin duda está dando resultados en sus poblaciones, pero debe ser un esfuerzo sostenido a largo plazo con la participación y responsabilidad de toda la sociedad mexicana.
Actualmente, el águila real está catalogada en la NOM-059-SEMARNAT-2010 como una especie “amenazada”.
El águila real o águila dorada se caracteriza por tener un color café oscuro con tonalidades doradas en la cabeza y hombros. Se reproduce en zonas montañosas con áreas abiertas.
Se distribuye principalmente en zonas áridas, semiáridas y montañosas con bosques templados. Se estima que el águila real se distribuía históricamente desde Michoacán, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo y el sur de San Luis Potosí y Tamaulipas, hacia el resto del norte de México.
La principal causa del declive de las poblaciones de águila real en México es la pérdida o deterioro de su hábitat y la consecuente reducción en la disponibilidad de presas y sitios de anidación. Este fenómeno es ocasionado principalmente por la agricultura, la ganadería extensiva y la urbanización en el área de distribución de la especie. BP