¿QUÉ VIENE?
Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ
Me voy a permitir compartir un mensaje de año nuevo que envié a algunos amigos y que, en este espacio, de corazón, deseo a quien amablemente me lea:
Fe.
En cualquier momento y enfrentando cualquier circunstancia.
Sin considerar tus capacidades o defectos; tu suerte o infortunio, el presente o el futuro, cualquiera que sea su fuente; religiosa o existencialista, no importa, no la pierdas y en todo caso, encuéntrala.
Eso deseo para ti este 2025, Fe.
En días pasados trascendió que la gobernadora del estado envió al congreso local una iniciativa de cambio constitucional y de ley que pretende emular lo modificado a nivel federal para que el poder judicial en el estado, jueces y magistrados, sean electos por el voto directo del pueblo.
Ninguna sorpresa, las líneas de actuación que todo el régimen morenista y aliados ha seguido son coherentes. Actúan reivindicando, replicando, apropiando.
Sin embargo, diputados y poder ejecutivo se encuentran ante una oportunidad especial. Lo que ha venido sucediendo en la federación ha mostrado lados flacos que se pueden corregir y que, intentar mejorar estos aspectos, no necesariamente pondría en conflicto o contra la idea de este profundo cambio.
Desde la convocatoria que se emita buscando aspirantes, el número de candidaturas por posición, el diseño de un método de selección que permita tener perfiles adecuados; la asignación de los recursos económicos, humanos y materiales para que sea un proceso electivo confiable y seguro; la calendarización del procedimiento y el respeto a los derechos laborales y credenciales de los actuales funcionarios. Todo lo anterior, ejemplo de puntos finos que se pudieran trabajar para generar un modelo optimizado.
Colima podría dar el ejemplo y, como en otras ocasiones, mostrarse como ese exitoso laboratorio de donde han surgido exitosamente más de una política pública nacional.
Con los números de diputados y la armonización de dos de tres poderes en el estado, este cambio, como Tanos, es inevitable. Creo que los afanes tendrán que enfocarse precisamente en que esta modalidad nazca mejorada localmente.
El llamado es para la gobernadora, para todos los diputados locales, para todos los partidos; para la sociedad civil, tal como barras de abogados, sector académico y otros interesados. Genuinamente creo que, envueltos en lo esperanzador de las fechas, vale la pena construir la CONVERGENCIA.
MICROCUENTO
Sonó. Discretamente me asomé y dudé atender el llamado. Insistió y eso me hizo sentir incómodo, la conciencia me mordió y remordió. Se supone que empeñé palabra y compromiso. El tercer timbrazo desmoronó mi convicción. Me quedé con dos de mole y uno de carnita en salsita verde.
