¿QUÉ VIENE?
Por: Sean Osmin HAMUD RUIZ
Y seguimos en Jauja. Casi desde el principio de estos pandémicos tiempos ha habido un aspecto político inmiscuido. Un factor que nada tiene que ver con el problema de salud o económico.
Desde las desafortunadas cuentas de infectados y defunciones, que no guarda la menor de las lógicas, hasta la disonancia que han resultado las recomendaciones o cuidados que tendríamos que guardar.
Federación, estados y municipios no han ido parejos ni en cifras, ni en fechas, ni en el uso del cubre bocas, situación más que lamentable y que hoy coloca a nuestro país en el top 5 de muertos por covid.
Y hoy, tampoco nos ponemos de acuerdo con la reactivación económica y el comportamiento social deseado.
El gobierno del estado, consensuado con los integrantes del consejo de protección civil, emitió medidas que endurecen lo requerido a la sociedad en general. Se pretende limitar la movilidad de las personas, seguir con una baja actividad tanto de las empresas y otras.
Muchas críticas, pocas alternativas. Por supuesto que sería muy interesante escuchar los porqué no y también los cómo si. Finalmente el tiempo será el juez implacable de quien tendrá la razón.
El problema es que ni los infectados ni los decesos ceden.
Y creo que vale mucho la pena preguntarle a quienes ostentan alguna responsabilidad y mandan sus mensajes encontrados, ¿aparentar emempatía, ayuda? ¿Genuinamente decir que es excesivo pedirle a la gente responsabilidad en su comportamiento, contribuye?
Más de 100 días después, la demagogia sigue estando por encima de cualquier estrategia.
El cálculo político puesto en las próximas elecciones, controla las decisiones, declaraciones y acciones de algunos por encima de la cooperación.
Las cifras hablan por sí solas.