Costa Rica y Nicaragua volvieron a reafirmarse ayer en sus respectivas posiciones: San José pidió como condición para el diálogo la retirada de las tropas nicaragüenses y Managua insiste en una conversación sin condiciones.
En una sesión marcada por presentaciones y discursos sobre el conflicto por parte de los embajadores de Costa Rica, Enrique Castillo, y de Nicaragua, Denis Moncada, y nuevas acusaciones mutuas, las dos partes dejaron claros que no quieren ceder.
Al inicio de la sesión, la Presidencia del Consejo Permanente de la OEA propuso un documento de trabajo para lograr una resolución a la crisis, pero antes de ponerse a hablar sobre el texto, las dos naciones volvieron a enzarzarse sobre la delimitación de la frontera objeto de su conflicto y se lanzaron acusaciones mutuas.
Nicaragua hizo una extensa presentación del dragado del río San Juan y de mapas cartográficos a través de Jaime Incer Barquero, asesor ambiental del presidente y científico, y la proyección de un video de un noticiero de la cadena NR6 del 23 de octubre, en el que se muestra el “despliegue de fuerzas” policiales de Costa Rica “armadas como Ejércitos regulares”, según el embajador de Managua ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Denis Moncada.
El embajador de Costa Rica ante la OEA, Enrique Castillo, dijo que la presentación de Nicaragua era una acción “dilatoria más”, y acusó a Managua de tratar de “rectificar artificialmente” mediante las obras del dragado el curso del río San Juan y decir que la frontera es otra.