La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), Delegación Colima, recibió de un particular tres ejemplares de cotorrita atolera (Aratinga canicularis), especie enlistada en la NOM-059-SEMARNAT-2010, en la categoría de sujeta a protección especial (Pr).
Los ejemplares silvestres fueron sometidos a exámenes físicos y médicos, luego de ser entregados por un ciudadano, quien dijo que ya no podía hacerse cargo de éstos por lo que decidió llevarlos a la Delegación Federal de la PROFEPA en la entidad.
Como parte de su responsabilidad, que es el cuidado de la vida silvestre, la PROFEPA proporcionará a los psitácidos un destino final adecuado para su bienestar y desarrollo, cumpliendo con las formalidades que la ley señala y de acuerdo con las facultades que le confiere la ley en la materia.
Por tal motivo, analiza la posibilidad de liberar a las tres cotorritas atoleras en su entorno natural o entregarlas en depositaría a un Centro de Integración de Vida Silvestre (CIVS), tomando en consideración sus condiciones físicas.
Cabe señalar que esta especie es de tamaño medio, de la familia de los loros (Psittacidae). Habita en zonas áridas, bosques semihúmedos y áreas semiabiertas, así como en montañas y lugares cercanos a las costas del Océano Pacífico, desde Sinaloa, en el oeste de México, hasta el occidente de Costa Rica.
El ave alcanza 22.5 centímetros de largo y 80 gramos de peso; el adulto regularmente es de color verde, con un tono oliváceo en el pecho y tiene las plumas externas de las alas de un tono azul, con revestimientos de color amarillo.
Los cotorros atoleros se alimentan en grupos de hasta 100 ejemplares fuera de la temporada de reproducción y consumen semillas, flores y frutos. En cautiverio, pueden alimentarse con semillas de girasol y alpiste.
La población de esta especie ha decrecido en varias áreas debido a la persecución para el mercado ilegal. Por ello, se encuentra enlistada en la NOM-059-SEMARNAT-2010, en la categoría de sujeta a protección especial (Pr). BP
