Por Héctor Romero Fierro
Penoso el tercer lugar al situarse nuestro país a nivel mundial al registrar más muertes que siete países con mas habitantes que México, así mismo el pasado sábado registró un nuevo récord de contagios en un solo día, situándose ahí en un quinto lugar mundial y sexto en el total de contagios totales, lo que habla del pésimo manejo que ha tenido nuestro país en el manejo del virus.
En febrero López decía que “Tenemos los médicos, los especialistas, los hospitales, la capacidad para hacerle frente a este caso de coronavirus ” (28-feb), “hay que abrazarse, no pasa nada” (4 marzo), ya el 11 de febrero nos había condenado: “No vamos a cometer el error que se cometió en el gobierno (de Calderón) ¿Se acuerdan que nos pusieron a todos (cubrebocas)?, “No dejen de salir”, “tenemos que salir, vamos de nuevo a enfrentar la realidad” (15-jun). A la fecha y a pesar de que se dan cuenta de sus errores siguen él y el sub secretario López- Gatell minimizando la situación, afirmando en varias ocasiones que ya pasó lo peor, que ya “domamos la pandemia” o que “aplanamos la curva” a pesar de que las cifras nos dicen lo contrario.
Si con las cifras oficiales tenemos esos penosos lugares, en realidad ¿qué lugar ocuparemos con las cifras reales de muertes por coronavirus?, porque nadie puede negar que en México se han ocultado el número de muertos real, ese sub-registro es una conducta criminal, por ello cuando algunos gobernadores piden la renuncia de López-Gatell, lo que debería hacer el Presidente es nombrar a alguien que lo supla y lograr un buen interlocutor con los inconformes, y además que se dedique a la pandemia y no a la política. Lo bueno es que nos dijeron que la OMS se llevaría a este personaje a colaborar con ellos, ¿cuándo se va?
En el mismo sentido, los homicidios dolosos cuya gran mayoría provienen de delitos federales y por ende bajo la responsabilidad del gobierno federal no disminuyen como lo prometió el Presidente en campaña, las cifras preliminares que arroja la propia autoridad, nos reporta que cerramos el periodo de lo que va del sexenio de Manuel Andrés López Obrador (MALO), esto es, desde que tomó posesión hasta el 31 de julio de 2020 con 57,255 muertos, cifra que contrasta con solo 22,890 del mismo periodo reportados por Vicente Fox, o solo 18,451 reportados por Felipe Calderón (y es a quien culpan de la “guerra”) o los 29,035 que reportó Peña Nieto. Solo durante julio de 2020 se reportan 2,519 homicidios dolosos, destacando el estado de Guanajuato, en segundo lugar el Estado de México y en tercero, Chihuahua.
Debemos reconocer el excelente operativo realizado, y que ahora sí concluyó con la detención de “El Marro”. Eso permitirá bajar este tipo de homicidios en esa zona del país, después de que se recrudezcan estos, derivado de que otros cárteles pelearán el control de la plaza, por lo que debemos estar atentos a lo que ocurra en las próximas semanas en la zona.
Qué bueno que, por fin, el gobierno federal está atacando, después de casi dos años de dejarlos crecer, a cárteles, sin embargo, la duda que tienen muchos mexicanos es si atacará con la misma fuerza a los integrantes del Cártel de Sinaloa, ya que después de la liberación del Junior del Chapo no hemos visto ningún operativo en contra de estos. Yo ya no entiendo, si van a ir tras los capos del narcotráfico, porque habían dicho que ya no iría detrás de estos, ¿o solo de algunos? Por cierto, ¿en qué quedaría la investigación que prometió el secretario Alfonso Durazo de lo que el llamó montaje, del CJNG donde en un video mostraron los vehículos y armamento de una de sus células? Ya no se dijo nada, como tampoco se ha informado a los jaliscienses del secuestro de varios empresarios del Estado de Guanajuato ocurrido en Puerto Vallarta.
En las cifras económicas se reportan fracasos similares cuando a esta fecha se reporta que la población con ingreso laboral inferior al costo de la canasta alimentaria es del 54.9%, debacle económico que inició antes que los efectos del coronavirus, también es impresionante la caída de la economía mexicana la cual se desplomó sólo en el segundo semestre del año un 17.3% del Producto Interno Bruto, impulsado por las erróneas políticas del gobierno federal, el Covid y principalmente por la falta de un verdadero programa de reactivación, que lamentablemente no existe.
Los efectos ya los empieza a sufrir la población. Inclusive Porfirio Muñoz Ledo, quien se ha convertido en una voz crítica al interior de Morena Co., recomendó que ante “la aterradora desaceleración de la economía se exige una política contra-cíclica contundente que implique el incremento del gasto y perderle miedo al déficit público, como lo hacen todos los países del mundo”.
Mientras, vemos a un Presidente sin rumbo en lo sanitario y en lo económico, con planes de austeridad tomados de algún plan ranchero de los ochentas, que solo hunden al país, enfrascado en destinar todos los recursos públicos a sus proyectos faraónicos de Dos Bocas y el Tren Maya entre otros, el hambre y las muertes no importan, al cabo que, “ya domamos la pandemia” y ya agarramos a “El Marro”, viva México.