Colima.- Luego de que elementos de la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos de Jalisco, realizaron un sobrevuelo de observación del cono del Volcán de Colima, se detectó que el domo que tenía desde el 2007 ha quedado destruido, derivado de la reciente actividad que se registró el 6 de enero.
A las 21:40 horas de este 10 de enero, y luego de 4 horas previas con presencia de eventos sísmicos de tipo volcánico, se registró un evento explosivo de baja magnitud (similar al ocurrido el día 6 de enero de 2013), que provocó la expulsión de material incandescente hacia el sector poniente (oeste) del edificio volcánico.
La explosión ocurrida anoche en conjunto con el evento registrado el pasado 6 de enero, destruyó gran parte del domo existente en la cima del volcán desde el año 2007, formando un nuevo cráter con dimensiones aproximadas de 220 metros de diámetro y profundidad máxima promedio de 50 metros. De acuerdo al análisis realizado por el Comité Científico Jalisco-Colima se estima que en conjunto ambos eventos, expulsaron aproximadamente 1.5 millones de metros cúbicos de material volcánico que formaba parte de este domo destruido.
Sobrevuelo 11 de enero 2013
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Durante la mañana de este día viernes 11 de enero, en sobrevuelo efectuado por científicos de Jalisco y Colima a bordo del helicóptero Fénix de Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos Jalisco, se observó en la parte central del nuevo cráter, un cuerpo lávico que representa una nueva efusión de magma, mismo que de acuerdo a la información proporcionada por la cámara térmica utilizada durante el vuelo, presenta una temperatura menor a 200° C, lo que hace indicar una tasa de efusión baja (volumen y velocidad de salida de magma), situación que coincide con la observación de poca desgasificación (fumarolas prácticamente inexistentes) en general.
El evento de la noche del 10 de enero, generó una columna de ceniza que por efecto de los vientos (en la presente temporada tienen dirección predominante del suroeste al noreste), viajaron hacia Ciudad Guzmán, depositando una ligera capa de ceniza volcánica en la superficie, sin que ello represente riesgos a la salud o la vida de las personas.
La actividad actual del volcán, sugiere que este tipo de eventos continuarán presentándose en un futuro inmediato, toda vez que se trata de un nuevo periodo de extrusión o salida de material magmático en la cumbre del volcán. Por lo que el monitoreo permanecerá de manera estrecha, a fin de que sean analizados cada uno de los diferentes parámetros de actividad volcánica, que permitan tomar las medidas preventivas y de seguridad que sean necesarias, a fin de proteger la vida de la población asentada en torno al volcán.
Derivado de la rápida evolución de este tipo de eventos explosivos, deberá mantenerse la población fuera de la zona de exclusión establecida en el Mapa de Peligros Volcánicos, que tiene una poligonal con un radio promedio de 7.5 kilómetros con respecto al cráter del volcán “El Colima”, por lo que el acceso al Parque Nacional “Nevado de Colima” se encuentra permitido el acceso hasta el punto conocido como “Puerto La Calle”, además se continúa en alerta y en permanente vigilancia de la actividad del volcán para reaccionar de manera inmediata ante alguna eventualidad. BP
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Sobrevuelo 6 de enero 2013
