En cumplimiento a la orden de aprehensión No. 319/1995, librada por el juez 1° de lo penal de la ciudad y puerto de Manzanillo, fue detenido en el puesto de revisión instalado por la PPJE y la PEP un homicida frente a la población de la Central.
Gabriel Larios Mendoza, de 35 años de edad, por su probable responsabilidad penal en la comisión del delito de homicidio calificado en agravio de Salvador Ramírez Díaz, por hechos ocurridos el pasado mes de octubre de 1991 en Marabasco.
El indiciado llegó al puesto de revisión a bordo de una camioneta Toyota, placas particulares de circulación JP54406, del estado de Jalisco, siendo informado por los agentes que se le haría una revisión de rutina, además le solicitaron una identificación para consultar el sistema de Plataforma México, para ver si había algún mandamiento judicial vigente en su contra.
Minutos después los agentes procedieron a su detención ya que había una orden de aprehensión vigente la No. 319/1995, en su contra librada por el juez 1° de lo penal de Manzanillo, por su probable responsabilidad penal en la comisión del delito de homicidio calificado en agravio de Salvador Ramírez Díaz.
De las investigaciones se desprende que los hechos ocurrieron el 6 de octubre de 1995, en el domicilio del finado, mismo que se ubica en la población de Marabasco, siendo acompañado por su esposa.
A las ocho de la noche a las afueras del inmueble se detuvo de manera intempestiva un automóvil marca Chevrolet, color rojo, con placas de circulación americanas, lo que llamó la atención de Salvador Ramírez Díaz.
De dicha unidad descendieron dos personas uno de ellos el detenido Gabriel Larios Mendoza, empuñando uno de ellos una pistola tipo escuadra calibre .38 súper y el otro una escopeta calibre 12”, al momento que decían “YA LLEGAMOS CHAVA”.
Ante dicha situación el occiso tomó un rifle pero Gabriel y su cómplice no le dieron tiempo a nada y accionaron sus armas sobre la humanidad de Salvador quien falleció en el lugar de los hechos, mientras los homicidas se dieron a la fuga a Ciuatlán, Jalisco.
Al continuar con las investigaciones en ese entonces, los probables responsables habían privado de la vida a Salvador Ramírez Díaz, porque meses antes el occiso había cometido un homicidio en el rancho El Fresnal, municipio de Pihuamo, Jalisco, y que por ello se había venido huyendo a Marabasco.