La actriz y modelo Jacqueline Arroyo confesó que tuvo que tomarse casi una botella de tequila para darse valor y poder posar desnuda en una revista para caballeros.
En conferencia de prensa, la también conductora de televisión, quien engalana la portada de marzo de «Playboy», dijo que es muy pudorosa y sólo bajo esas condiciones es que logró decidirse a aparecer al natural.
Añadió que sus fotografías no requirieron de retoque y que para tener el cuerpo que lució en la revista, hace entre cuatro y cinco horas diarias de ejercicio, además de rigurosas dietas a base de alimentos orgánicos; sin embargo, señaló que no se siente sexy.
Mencionó que lo único que le preocupa después de haber posado desnuda, es la reacción de su padre, ya que antes de hacer las fotos le dijo que dejaría de serlo si llegaba a mostrar su cuerpo.
En torno a la entrevista que aparece publicada en la revista, aceptó que tanto hombres como mujeres de distintos ámbitos, como la política, el deporte y los espectáculos la han asediado, lo mismo que un narcotraficante, de quien nunca supo su nombre.
Al respecto, enfatizó que su amor pertenecerá sólo al hombre que conquiste su corazón. Con ello dejó claro que le gustan los caballeros.
Jacqueline Arroyo ofreció disculpas por haber llegado con casi una hora de retraso, pero ello lo compensó al posar para los fotógrafos para que captaran una serie de imágenes.
Destacó que dependiendo del éxito de ventas de este número, podría haber una segunda edición con nuevas fotografías. «Los invito a que compren su revista y a que difundan este número para lograr una segunda edición», concluyó. {jathumbnail off}