Cada día se le complica más al presidente AMLO avanzar en la aprobación de su iniciativa de reforma eléctrica que por ser Constitucional, requiere mayoría calificada en el Congreso de la Unión, y Morena y sus aliados no tienen los votos necesarios para lograrlo.
Pero, además de tener en contra al sector empresarial, el gobierno norteamericano cada vez ha sido más reiterativo y claro: la reforma eléctrica de AMLO violenta los acuerdos del T-MEC, afecta la inversión privada y va en contra de los acuerdos internacionales para enfrentar el cambio climático, siendo éste uno de los programas más importantes del presidente Joe Biden.
Durante el mes de enero, la secretaria de Energía de E.U. visitó México para expresar al mandatario mexicano las preocupaciones del gobierno de E.U., los empresarios y de los legisladores estadunidenses, en caso de aprobarse dicha reforma en sus términos propuestos.
Ken Salazar, embajador de Estados Unidos, afirmó que el presidente Andrés Manuel López Obrador “tiene razón” al promover su reforma eléctrica, pues las leyes se tienen que revisar y reformar al paso del tiempo, y México lleva desde 2013 sin modificar el marco legal en la materia: “Se tienen que entender las razones del presidente”.
Está declaración creó confusión y el propio presidente AMLO la tomó como un apoyo de E.U. a su proyecto de reforma eléctrica, saludando la declaración, exclamó: “¡muy bien, Ken!”, al referirse a las declaraciones que un hizo el embajador estadunidense.
Ante la confusión y la sorpresa causada por dicha declaración, el diplomático matizó y puntualizó que, entre sus prioridades, está ver por los inversionistas y las empresas de EU “para que exista un piso justo y parejo”.
El mandatario agradeció al embajador:“A lo mejor a algunos empresarios de EU, y de aquí también, no les va a gustar pero… ¡muy bien, Ken! es que es un hombre con juicio práctico, con sentido común. “Él (Salazar) sabe, como lo expresó, que es necesario revisar el marco legal constantemente porque vivimos en un mundo cambiante”.
A través de su cuenta de Twitter, el embajador subrayó que su país respeta la soberanía de México y confía en que la actual administración realizará la reforma al sector energético con base en los compromisos establecidos en el T-MEC.
Reacción de E.U.
El Embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, contradijo a la Administración de Joe Biden sobre la reforma energética del presidente Andrés Manuel López Obrador po,r lo que debería ser removido del cargo, consideró ayer la columnista Mary Anastasia O’Grady, en un artículo publicado en The Wall Street Journal.
«No hay forma de estar exagerando el mal juicio de Salazar. En juego están las reformas constitucionales a las leyes energéticas de México, propuestas en septiembre por AMLO y pendientes de aprobación en el Congreso.
«Las reformas contravienen directamente los compromisos del País en virtud del Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá para garantizar mercados abiertos y competitivos e igualdad de trato para todas las partes, nacionales y extranjeras», destacó la columnista.
En el artículo se retoma la postura de la secretaria de Energía estadounidense, Jennifer Granholm, quien transmitió «preocupaciones reales sobre el posible impacto negativo de las reformas energéticas propuestas por México en la inversión privada estadounidense».
Cambio de opinión embajador de E.U
Tras ese hecho, Ken Salazar, se lanzó contra la reforma eléctrica y declaró: “El gobierno de Estados Unidos ha expresado reiteradamente preocupación sobre la propuesta actual del sector energético de México. Promover el uso de tecnologías más sucias, anticuadas y caras sobre alternativas renovables eficientes, pondría en desventaja tanto a consumidores como a la economía en general”.
Salazar sostuvo que la posición del gobierno de Estados Unidos sobre el tema de la reforma energética, es que se deben proteger las inversiones de las empresas de ese país en México, y ninguna ley puede violar los principios de los acuerdos comerciales en el marco del T-MEC.
La visita de John Kerry
El miércoles 9 de febrero, llegó a México Jonh Kerry, coordinador del proyecto del cambio climático del gobierno de E.U., con el propósito muy puntual de expresarle al presidente AMLO sus preocupaciones sobre el proyecto de la reforma eléctrica.
Jonh Kerry, senador demócrata durante muchos años, fue secretario de Estado y candidato demócrata a la presidencia de E.U. y tiene una gran influencia en el gobierno del presidente Biden.
Como resultado de la visita, los gobiernos de México y Estados Unidos acordaron formar un grupo de trabajo para potenciar la producción de energías limpias en nuestro país, aseguró el canciller Marcelo Ebrard.
Ebrard Casaubon dijo que la preocupación de Kerry es acelerar la transición hacia las energías limpias:
En una entrevista para la agencia Reuters, Kerry aseguró que instó al presidente López Obrador a garantizar que su plan para impulsar el control estatal del mercado eléctrico no infrinja el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Expresamos preocupaciones de que no nos topemos con el T-MEC, que es importante tener las reformas que van a hacer, y creo que él quiere eso, que las reformas no actúen como obstáculo para un mercado abierto y competitivo”, dijo Kerry en la entrevista.
Kerry expuso que el crecimiento de las energías limpias puede colaborar a contener el cambio climático, por ello es que a Estados Unidos preocupa la iniciativa de reforma energética del presidente Andrés Manuel López Obrador, por considerar que va en sentido contrario.
El Enviado Especial para el Clima del Gobierno de Joe Biden, John Kerry, hizo un llamado para que el mercado sea abierto: «Sé que el presidente ha comenzado a hacer algunas reformas que son importantes para él y para su País».
«Lo que queremos hacer es trabajar con México, para reforzar, como dijo la Secretaria (Jennifer) Granholm, fortalecer la posibilidad de que el mercado sea abierto, competitivo y esperamos hacer esto en el momento en el que el Presidente sigue trabajando en estas reformas».
«Tenemos la oportunidad de trabajar de forma conjunta para liderar esta transformación que va a beneficiar a todos los ciudadanos». Menos contaminación, aire más limpio, menos enfermedades, vidas más saludables y buenos trabajos, y también electricidad a precios más bajos. O sea los propósitos de E.U. muy distantes y contrarios a lo que propone con su reforma eléctrica el presidente AMLO.
Aseguró que son respetuosos de la soberanía mexicana, y ofreció apoyo financiero para acelerar la transición energética de México, eso en respuesta al planteamiento anunciado el pasado martes por el presidente AMLO.
El gobierno de México busca sumarse al plan de Estados Unidos para lograr una “revolución” de energías limpias y combatir el cambio climático.
El presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que hoy al mediodía, durante su reunión con John Kerry, buscará créditos por parte de esa nación a baja tasa de interés para invertir en tecnología y producir energía limpia en nuestro país.
A cambio, México podría pagar dichos créditos con la misma energía limpia que produzcan presas, parques solares y eólicos, entre otros.
El mandatario mexicano enfatizó ante el funcionario de la Casa Blanca que la prioridad de su administración es acabar con la corrupción en el país; de ahí la “imperiosa necesidad” de modificar el actual esquema eléctrico en México dado su alto costo fiscal. O sea, el tema de la corrupción es la causa que origina la reforma Constitucional en materia eléctrica. En ese contexto, la pregunta es si no una mejor forma de combatir la corrupción.