El Toluca está en las Semifinales del Bicentenario 2010 al derrotar al América con marcador global de 4-2. Esta tarde en el Nemesio Diez, los Rojos ganaron 2-0.
El primer gol fue obra de Sinha 29’, a pase de Martín Romagnoli; después, Manuel Pérez al 89, convertiría con jugada individual.
El Toluca enfrentará a los Tuzos del Pachuca al quedar como el mejor colocado de la Tabla General, después de la eliminación de Rayados y Chivas. Así que, en Semifinales, Diablos e hidalguenses irán por el pase a la Gran Final.
El Partido
Espectacular fue el duelo previo en las tribunas, rojos o amarillos cantaron por su lado, hicieron ruido, pusieron color, ambiente, aire de liguilla en la capital mexiquense. Olor a futbol por las calles, disputa de playeras. Un boleto a las semifinales en juego.
Todo listo en el Nemesio Diez. Movió el Toluca con un balón largo, el primer intento que se escurrió por el fondo. Del otro lado, con un error de la zaga toluqueña, el balón le quedó a Ángel Reyna que no pudo rematar cuando le botó de más. Gran inicio.
El medio campo fue un terreno de batalla y talento. Los contenciones mordieron, intimidaron; los creativos mostraron su talento, Montenegro y Sinha imponían ritmo y condiciones.
Los Rojos empezaron a ganar rebotes. Al minuto 9, Carlos Esquivel llegó a línea de fondo y mandó un centro a media altura que se quedó en las manos del guardameta, Alfredo Talavera. Avisos, sólo avisos.
Voló Navarrete. El arquero Águila atajó con estética un disparo de Néstor Calderón desde fuera del área. Pero había ida y vuelta, América respondió con un centro desde la derecha que le quedó solo a Reyna, que tropezó y ya no pudo conectar. Se fue una clara.
Sinha y Montenegro dieron cátedra. Uno por cada lado se conectó con la tribuna. El de Toluca limpiaba las zonas despojándose de oponentes; Rolfi mostraba su técnica exquisita para poner pases con ventaja. Peligro y miedo en los zapatos de cualquiera de ellos.
Toluca cedió la posesión, las Águilas buscaron y buscaron espacios. Un disparo raso de Montenegro que pasó apenas por un costado fue la siguiente jugada inquietante. Era el minuto 26.
Y llegó el gol, explotó la tribuna. Al minuto 29, Toluca cobró rápido una pelota parada, Romagnoli cedió para Sinha que entró al área con comodidad, tomó botando la bola y cruzó para vencer a Navarrete. El 10, comandante de la orquesta, ponía la diferencia.
No, los de Coapa no inquietaban. Reyna tomó mucho el esférico, alzó la cara, hizo fintas, buscó cómo crear alarma en los Diablos, pero no, los mexiquenses eran precisos a la defensa. Tensión en el Nemesio Diez.
Al 37, nuevamente América probó. Fue el playera 18, Reyna, quien desbordó por la izquierda, se quitó a un par de oponentes, recortó al centro e impactó raso, pero Talavera contuvo con comodidad.
Intensidad de Liguilla en la cancha; los tambores choriceros no dejaban de sonar. Pero América, que necesitaba dos tantos para estar dentro, tenía el balón; tocaban de la misma manera, por la banda derecha, de Cerda a Rolfi, del argentino a Rosinei y del brasileño a Beausejour, así avanzaban. Sin espacios, la fórmula no resultaba.
El medio tiempo llegó con el sol a pleno, en la cancha se dibujaba más el escudo del Toluca; pero el Águila merodeaba. Faltaban 45 minutos, muchas cosas por escribir.
Reyna a punto del golazo. Inició el complemento y Ángel se despojó de cuatro Rojos, luego entró al área y cruzó de más. La pelota se escurrió con angustia amarilla. Buen inicio, la segunda parte prometía.
Un guerrero más a la cancha, Alonso Sandoval fue enviado por Jesús Ramírez para ofender de mejor manera, Layún el sacrificado.
Cerca otra vez. El mismo Sandoval entró al área solo, gracias a un pase de Rolfi que lo dejó con todas las ventajas. El playera 7 impactó con mucha fuerza pero estrelló la bola en el travesaño. Minuto 52.
La precisión no fue aliada del América, las decisiones no fueron las acertadas, otra vez Reyna quedaría con posibilidad de disparo y elegiría mal, quiso conducir y la perdió. Se fue de nuevo.
Presión capitalina. Los Cremas encerraron a los locales, hicieron suya la cancha pero no la contundencia. Beausejour por izquierda; Reyna por derecha; Montenegro por el centro. No generaban el futbol suficiente.
En el minuto 61, Vladimir Marín que acababa de ingresar disparó desde lejos y puso su impacto fuera del poste, exigió a Armando Navarrete. La ola roja no dejaba de mojar.
Enrique Esqueda se sumó al ataque, ingresó por el Torito. Montenegro probó a Talavera, tiro raso, pero el arquero se mostró seguro de manos. La puerta del “infierno”, no se abría.
La afición despidió efusiva a Sinha, el 10 que brilló en el partido y a Mancilla, siempre peligroso, hoy marcado a la perfección.
Las alas no le funcionaron hoy al América, el gol no apareció, algo faltó. El Rojo se alzó en alto, ganaba el juego y hacía cómplice a su afición, que contaba ¡Ole, Ole, Diablos, Diablos!
El empuje de los locales llevaría a que Manuel Pérez hiciera una buena jugada por la banda derecha, se despojara de oponentes y tirara cruzado para vencer a Navarrete, después de un recorte hacia el centro. Era el segundo.
Los Rojos a un paso de la Final, enfrentarán al Pachuca. Su “infierno” fue más que el vuelo del Águila.
Toluca y su afición, semifinalistas, están de fiesta.