Quintana Roo.- Durante su audiencia en el Cereso de Cancún, Quintana Roo, Mario Marín, ex gobernador de Puebla detenido ayer en Acapulco, Guerrero, se reservó su derecho a declarar tras conocer la acusación que presentó en su contra la Fiscalía General de la República (FGR) como probable responsable del delito de tortura en agravio de la periodista Lydia Cacho.
La publicación señala que funcionarios federales revelaron que la defensa de ‘El Gober Precioso’ solicitó a un juez federal la duplicidad del término constitucional, que consta de 144 horas, para resolver su situación jurídica.
Durante la audiencia, Mario Marín solicitó al juez seguir su proceso en arraigo domiciliario debido a su edad y a un padecimiento en el riñón, así como por la pandemia de COVID19, pero se la negó, informó la organización Artículo 19.
La diligencia la presidió Gerardo Vázquez Morales, juez segundo de Distrito en Materia Penal con residencia en Cancún. La FGR notificó a Mario Marín de que se le acusa por un delito grave, por lo que deberá permanecer recluido en el Centro de Readaptación Social de Cancún.
El delito del que se le acusa está tipificado como grave y no alcanza libertad bajo caución, por lo que fue trasladado a Cancún, Quintana Roo, para ser puesto a disposición de la autoridad judicial que lo requería.