Colima.- En Colima la tasa de embarazo en adolescentes disminuyó al pasar de 59 por cada mil adolescentes entre 10 y 19 años en 2012 a 37 por cada mil adolescentes en 2016, informó Alejandra Chavoya Loza, sub directora de Prevención y Promoción de la Salud.
Los nacimientos vivos registrados en Colima indican una tendencia a la baja al pasar de 2 mil 677 embarazos en niñas mayores de 15, menores de 20 y 116 embarazos en niñas menores de 15 en 2009 a mil 968 embarazos en el primer grupo y 61 en el segundo durante 2016.
“A pesar de que es más la población adolescente no son más las adolescentes que se embarazan, se mantiene con un número estable o tendiente a la baja”.
La sub directora explicó la complejidad que existe en medir los embarazos adolescentes en el estado, pues en los registros también se contabilizan los embarazos de jóvenes del sur de Jalisco o el norte de Michoacán que viajan para ser atendidas en la entidad.
Cerca de un 20 por ciento de los embarazos adolescentes registrados pertenecen a este sector foráneo, por lo que deberían implementarse estrategias regionales para atender este fenómeno en la zona.
Focos de atención
Tecomán es el municipio considerado como mayor foco de atención en este tema, pues además de contabilizar los embarazos adolescentes de esa localidad, se considera la población flotante de Michoacán y Guerrero que acude a los centros de salud locales para atenderse.
Otros de los municipios donde se presta particular atención son Manzanillo, donde casi el 30 por ciento de sus eventos obstétricos son del sur de Jalisco, y Minatitlán.
Factores
Chavoya Loza indicó que los factores vinculados al embarazo adolescente son la vulnerabilidad social y la falta de oportunidades como a nivel nacional, pero en diferente proporción.
“En Colima no podemos hablar que tengamos el mismo nivel de vulnerabilidad que el resto de las entidades del país, ni el mismo nivel de falta de oportunidades.”
En el estado también se consideran la violencia en contra de la mujer y la falta de información adecuada como factores vinculados a éste fenómeno.
Estrategias
La Secretaría de Salud trabaja en conjunto con otras instituciones para atender la problemática desde varios sectores. Entre ellas destaca la Secretaría de Educación, de la Juventud, el Instituto Mexicano del Seguro Social, la Conapo, asociaciones civiles y otros.
También aclaró que el tema de sexualidad está incorporado a los planes y programas desde 2015, en ellos se aborda el tema de manera integral, no sólo desde la parte biológica sino lo social, a la vez que se fomenta la toma de decisiones informadas.
Sin embargo, el gran problema sigue siendo la postura cerrada de algunos padres de familia que impiden que se compartan los contenidos de sexualidad entre los adolescentes por miedo a “fomentar el sexo”.
Para ello, Alejandra Chavoya recomendó a los padres de familia abrir la mente y mejorar los canales de comunicación para que los jóvenes puedan tomar decisiones asesorados por expertos.
“Asumir los retos es complicado y ahí es donde todos se deben sumar al ritmo de trabajo”.
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