Manzanillo – Las ventas de Playa se incrementaron hasta en un 30 por ciento en zonas como Miramar y La Boquita durante el puente vacacional del pasado fin de semana por lo que fue considerado como una etapa aceptable para los comerciantes de estos balnearios.
Entrevistado al respecto Salvador Zárate, dirigente de los ramaderos en La Boquita, admitió que está etapa no cumplió con las expectativas del todo; comentó que esperaban que el aumento de sus ventas promediará cuando menos un 50 por ciento.
No obstante sostuvo que los ingresos por este concepto no fueron nada despreciables y enmarcan el cierre del periodo más complejo para la industria turística local: septiembre-octubre.
Por su parte Raúl Robles, de la playa de Miramar, consideró que las aspiraciones en ventas no cuajaron debido a que el turismo que llegó era en su mayoría local y escasos visitantes del Bajío por lo que la capacidad de gasto era mucho menor; coincidió al señalar que lo mejor del fin de semana es el inicio de una etapa más prometedora para el sector.
«Estamos hablando de que en noviembre habrá otro puente muy importante, más atractivo, como es el 20 de noviembre y también en este mes hay más turismo extranjero por la temporada de charters y por diferentes eventos en que Manzanillo será sede, eso nos anima», sentenció. BP
